Tres gasolineras de Repsol de Lugo pagaron las reparaciones de los daños causados por el gasoil en otros tantos coches patrulla de la Guardia Civil de Tráfico que se averiaron en días pasados en la provincia. Dos de los vehículos quedaron fueron de servicio el día 23: uno de ellos del destacamento de Baralla y el otro de la ciudad de Lugo. Ambos vehículos habían repostado en gasolineras de Repsol cercanas a sus centros de operaciones. El día 24 se averió el tercer coche patrulla, en este caso de la localidad de Monforte, por la misma causa, y que también había repostado en una gasolinera de la marca Repsol.
Los tres vehículos fueron trasladados a los respectivos concesionarios oficiales, en donde se realizaron las reparaciones, que en cada uno de los casos rondó los 200 euros de coste. Las tres gasolineras de Repsol implicadas se hicieron cargo del coste de la reparación de los vehículos de la Guardia Civil, que los retiró de los talleres sin coste alguno una vez que fueron revisados por los mecánicos y quedaron listos para volver a funcionar.
La película y el filtro atascado
El informe de los talleres fue en los tres casos el mismo, y también similar al de otros muchos turismos particulares averiados en las últimas semanas: «Se forma una película que, al entrar en contacto con el filtro del gasoil, se cristaliza hasta taponar el filtro y el vehículo se para. Cambio de filtros, limpieza del depósito y del sistema de inyección». El parte de trabajo del taller viene a demostrar que es el mismo caso que ha ocurrido en todos los vehículos particulares, y que todavía siguen llegando a los talleres, aunque parece que ahora ya no hay partidas de combustible en mal estado en las gasolineras.
Los vehículos de Tráfico de Lugo pasarán a repostar a partir de ahora el combustible diésel +10, que parece que es un producto de mayor calidad que el gasoil convencional, que era el que repostaban hasta ahora los vehículos patrulla de motor diésel, a pesar de ser de última generación.
Por otra parte, fuentes de la Guardia Civil explicaron ayer que cada organismo tiene que asumir su competencia y que -no habiendo denuncias por medio- el control de los combustibles es una responsabilidad de la Consellería de Industria, que tendrá que determinar de quién es la responsabilidad.
Consultas en Consumo
Por ahora no existe un culpable identificado de las muchas averías producidas en coches y camiones de Galicia, aunque todo parece indicar que tendrán que ser las gasolineras o sus suministradores. La oficina de Consumo de Lugo recibió en las últimas semanas numerosas consultas telefónicas sobre cómo actuar ante el problema del gasoil. Sin embargo, no se formalizó ninguna reclamación, hasta el momento, tal como confirmó ayer el propio delegado provincial de la Consellería de Industria, Ramón Cortés.