El Servicio Provincial de Costas de Pontevedra no dispone de presupuesto ni de personal para colocar una valla que advierta del peligro que supone la tristemente famosa Pedra Negra de Oia.
La roca sobresale al mar abierto y es un lugar elegido por muchas personas para pescar. Pero también supone una trampa que puede ser mortal. Cuando hay marejada, el agua rodea esta enorme roca y atrapa a quien se encuentre subido encima. Hace seis años perdieron aquí la vida dos pescadores tras ser arrastrados por una ola.
Este fatídico lugar también alimentó las crónicas de sucesos el pasado mes de agosto. Dos pescadores tuvieron que ser rescatados el día 5 después de que la subida del nivel del mar los cogiera por sorpresa. Trece días después, un matrimonio con dos hijos y un pescador volvieron a quedar atrapados en la misma roca, obligando una vez más a intervenir a los servicios de emergencia de la Xunta.
Durante los últimos años se han contado decenas de casos similares que se explican por la ignorancia de muchos aficionados a la pesca del peligro que supone la Pedra Negra. Por ese motivo, y tras los acontecimientos del verano, el alcalde de Oia, Alejandro Rodríguez, del PP, decidió dirigirse al organismo con competencias en la zona, el Servicio de Costas, dependiente del Ministerio de Medio Ambiente, para solicitar la colocación de un cartel en el que se advierta a los usuarios del peligro existente en el lugar.
«Ni personal ni presupuesto»
La respuesta que acaba de recibir ha indignado al regidor. «No es posible acceder a la solicitud, toda vez que este servicio no dispone ni de personal ni de presupuesto para la acometida de dichas obras», le ha dicho la jefa de este organismo.
El Servicio de Costas podría llegar a autorizar la colocación de una valla, siempre y cuando no le cueste ni un solo euro. La falta de dinero para colocar el cartel contrasta con los 300.000 euros que este departamento invierte en la creación de un paseo en el municipio vecino de Nigrán, situado a unos 20 kilómetros.
El alcalde de Oia escribirá una carta al presidente de la Xunta para ver si este le hace caso.