Los tribunales tienen la última palabra y llevan varios años sin hablar de blanqueo

La Voz

GALICIA

07 jul 2008 . Actualizado a las 02:00 h.

Del centenar largo de investigaciones patrimoniales realizadas en Galicia en el último decenio y que han afectado a personas relacionadas con el narcotráfico, se cuentan con los dedos de una mano sobre las que ha recaído resolución judicial firme.

Además de Oubiña y los Charlines, el único caso sobre el que existe constancia de que haya recaído una resolución condenatoria, aunque de forma tangencial, afecta a Sito Miñanco. La Audiencia Nacional dictó una sentencia en octubre del 2000 en la que se le confiscan 123 millones de pesetas que estaban bloqueados en una cuenta en un banco suizo a nombre de su hermano Manuel Prado Bugallo y de Odalys de Rivera y Gracia, que entonces era pareja del cambadés.

Con otros, la Justicia ha sido más benévola. Vioque fue juzgado en el 2005 por una operación de tráfico de cocaína (Más Madera) ejecutada cuando estaba en libertad provisional por el alijo del Dobell. Con él se habían sentado en el banquillo su madre, su suegra y otros allegados, acusados como testaferros de un ingente patrimonio inmobiliario acumulado por el abogado, antes de su segunda caída por narcotráfico. La Audiencia Nacional lo condenó, pero el Supremo, un año más tarde, lo absolvió por falta de pruebas.

Los tribunales abordarán en breve la operación Cormorán, protagonizada por un narco histórico de Barbanza, al que la Guardia Civil descubrió un patrimonio inmobiliario valorado en 60 millones.