Portugal quiere evitar la «fuga de cerebros» médicos a Galicia

GALICIA

11 oct 2007 . Actualizado a las 02:00 h.

Cincuenta de las 300 plazas de primero de Medicina de la Universidade de Santiago van a estar ocupadas este año por alumnos portugueses. Ante esta situación, el ministro de Saúde de Portugal, António Correia de Campos, ha anunciado que «es preciso aumentar hasta 2.000 las actuales 1.400 plazas de ingreso al curso de Medicina en todo el país» porque, según señaló, se está dando una «salida de cerebros» hacia Galicia desde el país vecino.

Ese crecimiento sería de un 43% con respecto a las plazas que hay actualmente disponibles en todo Portugal. Según recoge la prensa portuguesa, el ministro dijo que no es socialmente justo que «nuestros mejores intelectos sean exportados a Galicia, donde están 50 alumnos en el primer año, o a dos o tres universidades de la República Checa, donde están algunas centenas, o a otras escuelas médicas junto a la frontera».

La presencia masiva de estudiantes portugueses en la carrera de Medicina en Santiago ha sido objeto de polémica en los últimos meses. La nota de corte de esa licenciatura, que en los últimos años nunca ha dejado de crecer, alcanzó en este curso el 8,40. En el anterior ya había llegado al 8,22. La puntuación de este año hizo que muchos estudiantes gallegos con una media superior al 8 se quedasen sin plaza. Sus padres formaron una asociación al considerar que habían sido discriminados.

Este curso, por el proceso de Bolonia, los estudiantes de otros países de la UE accedieron a las universidades españolas con los mismos criterios que los que siguen en sus propios países. Como en Portugal no hay selectividad, los alumnos lusos entraron en la facultad compostelana solo con el bachillerato. Los padres de los aspirantes gallegos reclamaron al Rectorado que estableciese una prueba de competencia lingüística, a modo de filtro, pero no se hizo. Su reivindicación se centra ahora en que se creen tantas plazas como el número de alumnos que no pudieron entrar por la presencia de los estudiantes portugueses.

Por su parte, el ministro de Saúde luso insistió en su argumentación: «Es evidente que 1.400 alumnos no es suficiente, teniendo en cuenta las previsiones de la evolución de la demografía médica». De hecho, recordó, las facultades portuguesas han aumentado radicalmente sus plazas en primero de Medicina en los últimos veinte años. Así, en 1986 había 192 estudiantes matriculados en primer curso; en 1995 ya eran 450, y el año pasado aumentaron en un 4%, ya que pasaron de los 1.352 en el curso 2006-2007 a los 1.400 actuales. Aunque para el ministro no es suficiente, tampoco puso un plazo para cumplir su deseo de aumentar la oferta.

De 14 a 50 en un año

Correia de Campos eligió un foro apropiado para hacer el anuncio. Lo hizo esta semana durante la inauguración de la Escuela de Ciencias de la Salud de la Universidad de Minho, ante los 50 primeros doctores formados en ese centro académico.

En Galicia, el incremento del número de alumnos portugueses en Medicina es evidente: el curso pasado eran 14 en primero y en éste son 50.