Un joven de 14 años estuvo 40 minutos clavado en la verja de un colegio

Nino Soto

GALICIA

02 ago 2007 . Actualizado a las 02:59 h.

pontevedra | Era una de las primeras veces que el joven L.???T.???P. saltaba la verja de hierro del colegio de educación infantil y primaria Álvarez Limeses, de Pontevedra, para jugar al fútbol en el patio de cemento, práctica habitual de los chavales de la ciudad del Lérez. Eran las 17.40 horas.

Pero el adolescente de 14 años, que pasará a cuarto de la E.??S.??O. el próximo curso escolar, se clavó una de las lanzas de la valla en su pierna izquierda mientras pretendía acceder al recinto, quedando atrapado durante unos cuarenta minutos. Fue liberado sobre las 18.20 horas.

«Era una de las primeras veces que venía a jugar con nosotros», señalaron varios amigos del adolescente, jóvenes que durante las tardes entran al patio del colegio para jugar y pasar el rato.

Afortunadamente, el centro está localizado al lado de la Comisaría de Pontevedra, en la céntrica calle de Joaquín Costa, y cuando los policías a la puerta de las instalaciones se percataron del incidente, acudieron inmediatamente a rescatar al herido. «Lo sujetaron durante 25 minutos para evitar que se desmayara y cayera hacia atrás», apuntaron fuentes conocedoras del caso. «La intervención de los policías fue tan acertada que la madre del joven fue a felicitarlos a comisaría en persona».

Se abren diligencias

Los funcionarios del Cuerpo Nacional de Policía sostuvieron al adolescente hasta que llegaron los bomberos y procedieron a cortar la lanza de la verja de cierre de la escuela para liberar así a L.?T.??P. Los servicios de emergencia y sanitarios se las ingeniaron para montar una especie de plataforma con tablones para que el chaval pudiera reposar. «La flecha estaba totalmente incrustada en su canilla», apuntaron fuentes de los bomberos. «Era la única forma de sacarlo de allí», añadieron.

La policía ha abierto diligencias a raíz del incidente y se informará al juzgado de guardia.

El joven fue trasladado en una ambulancia medicalizada del 061 al Hospital Domínguez, donde fue sometido a una intervención quirúrgica de urgencia. De acuerdo con fuentes del hospital, «se procedió a la extracción del objeto». L.?T.?P. tenía un pronóstico reservado y permaneció ingresado en el centro sanitario de la ciudad de Pontevedra.

El suceso provocó el enfado de muchos padres de alumnos ya que la APA remitió al Concello y a la dirección del Álvarez Limeses el 14 de junio una carta en la que exigía la restitución de la protección de las lanzas del cierre del colegio que se había retirado en mayo por orden de la directora.

«Estoy indignado», afirmó Marcos Castro, padre de dos alumnos del centro. «Es inaudito que la directora no sea consciente del peligro que supuso retirar la protección de la verja», subrayó.

Fernando Alonso, presidente de la APA, dijo ayer que ya había advertido de la posibilidad de que se produjera «un desafortunado accidente en la valla, puesto que los chavales la saltan habitualmente».

Muchos padres hablaron personalmente con la directora y el jefe de estudios del colegio para explicarles que «los chavales son chavales, y retirando la protección de la verja no iba a impedir que los críos accedieran al patio para jugar».

Marcos Castro estaba todavía molesto horas después del incidente. «Mira que avisamos de lo que podía ocurrir», apuntó.