El paso siguiente al sellado del vertedero de Mougá fue la creación del aula medioambiental Reciclaterra, que gestiona el Concello de Ferrol a través de la firma Seas. Justo a su lado han quedado un par de antiguas estructuras correspondientes a la obsoleta planta de compostaje que se levantaba en el área. Una hace de mirador elevado sobre el vertedero. La otra, un gran tubo digestor, sirve como recuerdo de aquella infraestructura, que nunca cumplió con su función.
Reciclaterra está programada, fundamentalmente, para recibir visitas de grupos escolares, el grueso de sus usuarios. De hecho, según las cifras facilitadas por el Ayuntamiento, los estudiantes fueron los más abundantes entre las casi de 3.000 personas que se acercaron a las instalaciones durante el pasado ejercicio para saber más sobre reciclaje.