La tala de árboles junto a las líneas eléctricas se incumple desde 1968

FERROL

La normativa atribuye a las empresas la responsabilidad de cumplir con esas tareas de mantenimiento

10 feb 2009 . Actualizado a las 11:47 h.

El reglamento de líneas eléctricas aéreas de alta tensión de 1968 y su sustituto del 2008 , que entrará en vigor en el 2010, obligan a talar los árboles que puedan caer fortuitamente sobre el cableado, y atribuyen la responsabilidad de cumplir esas tareas al concesionario de la línea, las empresas eléctricas. El párrafo que explica qué árboles deben ser eliminados está prácticamente calcado de un reglamento al otro. Sin embargo, el del año pasado es bastante más claro a la hora de repartir responsabilidades. Obliga al concesionario a informar a la Xunta de las masas de arbolado que puedan resultar amenazadoras para la línea y que estén fuera de la franja de servidumbre, y también obliga a los propietarios a permitir las talas cuando sean necesarias. La caída de árboles sobre las líneas fue la principal causa de los importantes problemas de suministro eléctrico provocados por el temporal del pasado día 23 en Ferrolterra. La borrasca Klaus dejó sin luz a cientos de vecinos durante días. En la parroquia ferrolana de Esmelle, por ejemplo, el suministro no se restableció hasta siete días después del paso del ciclón. Klaus trajo rachas de viento de gran fuerza, de más de 200 kilómetros por hora, según los anemómetros de Estaca de Bares y los astilleros de Navantia ubicados en la ría de Ferrol. Sin embargo, los expertos consideran que el viento, por si solo, no pudo causar tantos daños al conjunto de la red. El colapso fue provocado por los árboles situados a los lados de las líneas eléctricas que, derribados por el viento, provocaron cientos de averías en la infraestructura de suministro eléctrico, tanto en las líneas de baja tensión como en las de mayor potencia. Fenosa ya está redactando los proyectos para reconstruir la infraestructura destrozada por Klaus . ¿Cómo serán las nuevas líneas? La empresa se ha limitado a señalar que «lo mejor posible». En términos similares se expresaron fuentes de la Consellería de Industria, que no pudieron precisar si se darán directrices a la compañía a la hora de recomponer la red eléctrica, o si la Administración gallega colaborará de alguna forma para mejorar el servicio y evitar nuevos colapsos en el futuro. Franja de protección Por su parte, la Consellería de Medio Rural subrayó que la prevención de emergencias como Klaus queda fuera de sus competencias. El departamento de la Xunta que dirige Alfredo Suárez Canal sí recordó que en abril del 2007 entró en vigor la Lei de prevención e defensa contra incendios forestáis de Galicia , que obliga a limpiar de árboles y maleza una franja de cinco metros a ambos lados de las líneas eléctricas para evitar daños por el fuego. Desde la consellería señalaron que, tras la promulgación de la ley, las eléctricas llevaron a cabo importantes trabajos de limpieza y tala, especialmente alrededor de las líneas de alta y media tensión. Como consecuencia, asegura Medio Rural, la mayor parte de los daños en las líneas de alta tensión fueron causados por la fuerza del viento. Sin embargo, la consellería admite que las incidencias provocadas por árboles fueron mucho mayores en las líneas de media y, sobre todo, en las de baja tensión que llevan la energía eléctrica a los núcleos rurales, los más afectados por el temporal.