Rubalcaba defiende la reforma de las pensiones por vivir más

La Voz MADRID/LA VOZ.

ESPAÑA

Propone a las empresas que reduzcan horas de trabajo, en vez de despedir gente

13 dic 2010 . Actualizado a las 02:00 h.

El vicepresidente primero del Gobierno, Alfredo Pérez Rubalcaba, justificó ayer la próxima reforma del sistema de pensiones por «el aumento de la esperanza de vida en España registrado desde 1985».?El número dos del Ejecutivo aprovechó un mitin en Valencia, donde presentó a Jorge Alarte como candidato socialista a la Generalitat, para argumentar que «lo que antes valía para diez años, no vale ahora para veinte», en relación a los años que transcurren entre la edad de jubilación y el fallecimiento de los pensionistas.

En este sentido, alertó de que se registrarán problemas para el cobro de las pensiones a medio plazo «si no se aplican reformas». Rubalcaba atribuyó la toma de este tipo de medidas por una «crisis internacional que no da tregua».

«La austeridad de hoy y el esfuerzo que pedimos a los ciudadanos son los programas sociales del mañana, son la garantía de que mañana tendremos recursos suficientes para avanzar en políticas sociales», defendió. A juicio del ministro, «cuanto más difíciles son los tiempos que vivimos» por la crisis internacional, «más tiempo hay que gastar en explicar las cosas», por eso desmenuzó las razones que han movido al Gobierno a poner en marcha una política para salir de la crisis basada «en la austeridad, las reformas y la cohesión social».

Según Rubalcaba, hay que salir de la crisis «juntos» y planteó que para hacerlo hay que romper con el principio de que «las ganancias siempre se privatizan y las pérdidas se socializan». Propuso salir de ella «por la izquierda, todos juntos sin que se queden rezagados los más desfavorecidos: jóvenes, mujeres y mayores», en vez de que lo hagan «solo los que puedan».

Rubalcaba argumentó la austeridad como medio para «cortar la espiral de intereses que no paraban de crecer» y abogó por «reformas sociales distintas» como garantía «para poder competir en una economía globalizada».

Además, apostó por la «educación y la formación» como armas que van a permitir «competir en el futuro» en una sociedad del conocimiento y por eso defendió los proyectos educativos del Gobierno y las reformas en ciencia y tecnología, en las cajas de ahorros y en el mercado laboral. Criticó la «rigidez» del mercado laboral español y lo comparó con el alemán, donde en momentos de crisis, las empresas en vez de despedir a trabajadores reajustan su economía reduciendo las horas de trabajo.