La prórroga de los Presupuestos deja de nuevo la subida de las pensiones en el mínimo legal

Ana Balseiro
ana balseiro MADRID / LA VOZ

ECONOMÍA

Las pensiones en Galicia
La Voz

Los jubilados gallegos recibirán apenas 2 euros más en sus nóminas a partir de enero

19 oct 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Poco más de dos euros, eso es lo que se incrementará la pensión de jubilación media en Galicia a partir del próximo 1 de enero. Pasarán de los 869,37 euros que, según los últimos datos disponibles del Ministerio de Empleo y Seguridad Social, percibieron los jubilados gallegos en septiembre, a poco más de 871 euros. Se les aplicará la revalorización mínima que recoge la ley, del 0,25 %, tal y como se desprende del Plan Presupuestario para el 2017 -que se traduce en la prórroga de los Presupuestos de este año- aprobado en el último Consejo de Ministros por el Ejecutivo y que ya conoce la Comisión Europea.

Lo magro de la subida no dará para muchas alegrías, ya que apenas alcanza para un refresco, y es prácticamente lo mismo que la revalorización con la que los precios cerraron el pasado septiembre, en el que -tras 22 meses en negativo- el IPC se anotó un avance interanual del 0,2 %. Es decir, adiós a la posibilidad de ganar poder adquisitivo, habida cuenta, además, de que las subidas experimentadas por algunos de los bienes y servicios básicos se han disparado aún más. Sirvan como ejemplo el calzado (1,2 %), los alimentos (1,3 %) o los artículos de uso personal (3,2 %).

Pese a lo reducido del incremento de las pensiones después de la reforma del 2013, que lo desvinculó de la inflación y lo fijó en un mínimo del 0,25 % y un tope del IPC más un 0,50 %, la vicepresidenta del Gobierno recordó el viernes, en la rueda de prensa tras el Consejo de Ministros, que desde que se puso en marcha la actual fórmula de revisión anual las pensiones se habían incrementado en 2.077 millones de euros. «Si se hubiese aplicado el IPC, como antes, la Seguridad Social se habría ahorrado 1.240 millones», apuntó, ya que hasta ahora los precios han evolucionado en negativo.

El Parlamento pide un 1,2 %

Pero la lectura del Ejecutivo no convence ni a los sindicatos ni a la mayoría de los grupos de la oposición, que el jueves presentaron en el Congreso una proposición de ley -promovida por CC.OO. y UGT y con el apoyo de todo el arco parlamentario a excepción de Ciudadanos y, por supuesto, el PP- en la que reclaman que la subida de las pensiones para el próximo año sea del 1,2 %, más del cuádruple de lo previsto y exactamente la misma cuantía que el Gobierno espera que suban los precios en el 2017.

La propuesta, que no es vinculante, contó con el apoyo de un total de 178 diputados. Pero el Gobierno puede impedir que llegue a debatirse, ya que tiene derecho para vetar las iniciativas legislativas que puedan suponer una merma de los ingresos presupuestarios o un incremento de los gastos.

Los sindicatos negaron este extremo, subrayando que, dado que la Seguridad Social va camino de cerrar este año con el mayor déficit de su historia, lo que plantean es que el coste de la subida de las pensiones se financie a través de una partida presupuestaria extraordinaria y no con cargo a las cotizaciones sociales.

Sáenz de Santamaría reprochó a la oposición que no hubiera esperado a la reunión del Pacto de Toledo para plantear el asunto. «Lo oportuno hubiera sido esperar a la convocatoria del Pacto de Toledo y abordar en él cuantas medidas los grupos quieran plantear porque [las pensiones y su sostenibilidad] es uno de los grandes asuntos de Estado y debe analizarse desde un punto de vista más amplio», insistió. En cualquier caso, señaló que los departamentos a los que afecta esa iniciativa «analizarán y realizarán los informes pertinentes» para decidir si la vetan o no.

El Gobierno admite ante Bruselas que la hucha para las prestaciones se agotará ya el próximo año

El déficit de la Seguridad Social frisará los 19.000 millones de euros a finales de año, la cifra más elevada de su historia. Así se recoge en el Plan Presupuestario remitido por el Ejecutivo a Bruselas, en el que calcula que el agujero entre ingresos y gastos del sistema de la Seguridad Social será del 1,7 % este año -lejos del 1,1 % de la estimación inicial- y algo menor, del 1,4 % del PIB, para el 2017.

Los pertinaces números rojos de la Seguridad Social hacen que sus ingresos no alcancen para costear los gastos crecientes de un sistema al que cada vez se incorporan más beneficiarios. Los perceptores de pensiones contributivas aumentaron un 1,2 % anual en septiembre, según recoge el Ejecutivo en el documento enviado a Bruselas. Además, las prestaciones también son más altas, lo que contrasta con la mella que la crisis ha hecho en el número de cotizantes y en la cuantía de las aportaciones.

Todo lo anterior explica que el Ejecutivo comenzara a tirar en el 2012 del Fondo de Reserva de la Seguridad Social, comúnmente conocido como la hucha de las pensiones, básicamente para abonar las pagas extraordinarias de diciembre y julio. La hucha, que en el 2011 superaba los 68.800 millones de euros, apenas rebasará los 13.500 a finales de este año.

Esto hace que, de mantenerse el ritmo de disposiciones -el pasado julio se sacaron 9.700 millones, quedando 24.200, y aún falta la de diciembre-, el fondo no llegará más allá del próximo año, para el que se espera un déficit de la Seguridad Social del 1,4 %, es decir, unos 16.000 millones.

Ante esto, se multiplican las voces expertas que piden que se repiense el sistema para garantizar su sostenibilidad. Para hablar del futuro ayer comenzaron las reuniones de la Comisión del Pacto de Toledo. Lo hicieron a puerta cerrada, pero la preocupación y el debate que el problema suscita son públicos y hay propuestas para todos los gustos. Desde Podemos, por ejemplo, Íñigo Errejón propuso reponer el fondo de pensiones recuperando el dinero del rescate bancario, mientras que el ministro Margallo aboga por pagarlas con impuestos. Hay debate.

El gasto mensual en prestaciones vuelve a batir un récord en Galicia: 578 millones

El gasto mensual en pensiones en Galicia va de récord en récord. La última cifra disponible, del mes de septiembre, constata que el Estado se dejó algo más de 578 millones de euros en el pago de prestaciones por jubilación (la partida más relevante, con casi 408 millones), viudedad (otro centenar), incapacidad, orfandad y en favor de familiar. Es en conjunto un millón más que el mes anterior, y permite adelantar que el año acabará con el Estado desembolsando en Galicia más de 8.000 millones de euros para afrontar esta partida, incluyendo las extras.

Desde que arrancó el año, el importe de la nómina de las pensiones ha crecido en Galicia un 1,5 %. Y si se mide con lo que sucedía doce meses atrás, en septiembre del 2015, se ve cómo esa cifra ha engordado casi un 3 %, pasando de los 564 millones a esos más de 578. Si se observa más atrás, al inicio de la crisis, se ve cómo para un mes de este tipo en Galicia las prestaciones suponían menos de 430 millones.

¿Por qué, pese a que las pensiones solo se revalorizan un 0,25 % al año, se está produciendo un incremento tan alto de esos pagos en Galicia? Principalmente porque las nuevas altas en el sistema llegan con nóminas mucho más elevadas que las de aquellos que se van. No hay una compensación. El caso más evidente se da en las jubilaciones. En los ocho primeros meses del año se han incorporado al sistema 14.200 gallegos retirados del mercado laboral, con una prestación media de 1.160 euros, muy por encima del sistema. En cambio, las bajas han sido bastantes más, 15.600 hasta agosto, pero su retiro era de 772 euros. Una diferencia notable.