La alternativa que propone la Confederación Europea de Sindicatos (CES) es un pacto entre las instituciones europeas, las organizaciones empresariales y sindicales europeas que proteja los salarios, el empleo y el modelo social y de bienestar.
23 mar 2011 . Actualizado a las 17:41 h.Los secretarios generales de CCOO, Ignacio Fernández Toxo, y de UGT, Cándido Méndez, le transmitieron hoy al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, que el «pacto por el euro» que quiere aprobar mañana la Unión Europea aumentará el paro y las desigualdades entre los estados miembros.
Zapatero recibió esta mañana, junto al ministro de Trabajo, Valeriano Gómez, a Méndez y Toxo para tratar la reunión de mañana y del viernes del Consejo Europeo, donde está previsto que se apruebe el «pacto por el euro», y analizar cómo van las negociaciones de ambos sindicatos con la CEOE para reformar la negociación colectiva.
En la rueda de prensa posterior a la reunión, que duró algo más de dos horas, Méndez denunció que el pacto por el euro, antes denominado de la competitividad, hará que siga aumentando el desempleo, además de ser una «injerencia muy clara» en las políticas nacionales de los estados miembros.
Además, dijo que ese pacto trata a los pueblos y a las sociedades europeas de forma «rígida y uniforme», cuando son muy distintas y requieren de tratamientos diferentes.
Méndez también consideró que el «pacto por el euro» trata a las sociedades como empresas, por lo que su principal planteamiento es recortar los salarios como medida fundamental para aumentar la competitividad europea.
La alternativa que propone la Confederación Europea de Sindicatos (CES) es un pacto entre las instituciones europeas, las organizaciones empresariales y sindicales europeas que proteja los salarios, el empleo y el modelo social y de bienestar.
Toxo criticó además que el «pacto por el euro» renuncia a combatir el desempleo, ya que apenas le «dedica una línea y media en el borrador y del paro no se habla».
Asimismo, se renuncia a introducir modificaciones para reactivar el crecimiento económico, precisó Toxo, quien recordó que la CES apuesta por un proceso acelerado de armonización fiscal, sobre todo en materia del impuesto de sociedades, ya que a Irlanda no le ha salvado de movimientos especulativos ni de entrar en un proceso de rescate.
Preguntados sobre si Zapatero piensa llevar mañana a Bruselas alguna decisión sobre la reforma de la negociación colectiva española, Méndez respondió que no les ha «clarificado lo que va a decir», pero suponen que lo que va a plantear es que se está discutiendo con la voluntad de llegar a un acuerdo.
Al respecto, Toxo indicó que Zapatero expondrá en Bruselas sus compromisos de revisar la situación de determinados servicios profesionales, de crear una comisión asesora de la competitividad y de poner en práctica una reforma concursal, que ya está en proceso.
Otro compromiso de Zapatero del que informaron los sindicatos es el de negociar con ellos las conclusiones que apruebe mañana el Consejo Europeo, particularmente las que tienen que ver con el empleo.
En rueda de prensa posterior, el ministro de Trabajo, Valeriano Gómez, dijo que España no va al Consejo Europeo con sus alforjas vacías, ya que ha hecho la reforma laboral, de las políticas activas de empleo y ha diseñado un plan de choque para combatir el paro juvenil y de larga duración, entre otras.
No obstante, advirtió de que España debe acabar con el problema de falta de competitividad que tiene.
«No debemos mantener permanentemente un diferencial de precios tan alto como el que tiene la economía española con el resto de las economías del euro», opinó Gómez.