Mitsubishi se desvincula del coche eléctrico que Citroën fabricará en Vigo

Manoli Sío Dopeso
M. Sío Dopeso VIGO/LA VOZ.

ECONOMÍA

La multinacional desmiente la posibilidad de una alianza para la producción en común de una furgoneta

08 sep 2010 . Actualizado a las 02:36 h.

Vigo recorrió ayer las páginas económicas de media Europa y media Asia como el emplazamiento elegido por la alianza Mitsubishi y PSA Peugeot Citroën para fabricar un coche eléctrico. Pero la noticia no aguantó en portada más de 5 horas, hasta que la multinacional nipona emitió un desmentido a la agencia Reuters. «Mitsubishi no tiene planes para la producción conjunta de un coche eléctrico con PSA en ninguna fábrica española», aclaró.

La multinacional salió de este modo al paso de una información publicada ayer por el rotativo japonés Nikkei. Este diario reveló detalles del proyecto industrial que la factoría gallega espera desde hace varios meses, cuando la multinacional francesa avanzó su intención de sacar a la venta una versión eléctrica de las furgonetas Partner y Berlingo.

Ni el grupo PSA ni Mitsubishi han llegado a confirmar en ningún momento una alianza para este proyecto. Pero la credibilidad que de un modo especial la prensa francesa otorgó ayer a Nikkei, se explica por la cantidad de detalles que reveló sobre el desmentido proyecto. «Para mediados del 2011 estará instalada la nueva línea de producción. Al principio se fabricarán varios miles de vehículos al año, pero con la intención de alcanzar pronto una producción anual de entre 30.000 y 50.000 vehículos», aseguraba el medio nipón, que asigna al nuevo modelo un amplio mercado potencial de servicios postales, transportes y Administraciones públicas de toda Europa.

La planta de baterías sigue

Mitsubishi niega la mayor y su desmentido echa por tierra la producción conjunta con Citroën en Vigo. Sin embargo, los japoneses no hacen referencia en ningún momento a sus planes de construcción de una fábrica de baterías de litio en Galicia, un proyecto que la multinacional nipona confirmó al propio presidente del Gobierno, Rodríguez Zapatero, en su reciente visita a Japón.

Según fuentes próximas a las negociaciones, Mitsubishi y su socio Yuasa siguen estudiando el posible destino de una inversión próxima a los 500 millones de euros que generará más de un millar de puestos de trabajo. Según las mismas fuentes, la Plataforma Logística de Salvaterra es la opción que cuenta con más posibilidades, «pero no es la única y la decisión todavía no ha sido tomada».

En la decisión, que podría conocerse a finales de mes, podría dejar de pesar la opinión contraria a Vigo de la firma austrocanadiense Magna, si finalmente se desvincula del consorcio inversor. Sin embargo, la entrada de un nuevo aliado podría abrir nuevas posibilidades para el emplazamiento de la fábrica de baterías y complicar las posibilidades de Vigo.