Más de 827.000 hogares tienen hoy en el paro a todos sus miembros

Natalia Bore

ECONOMÍA

El Gobierno anuncia que «vigilará» por?si las familias más afectadas precisan «medidas adicionales»

24 ene 2009 . Actualizado a las 02:00 h.

Las peores previsiones han vuelto a cumplirse. Los resultados de la encuesta de población activa (EPA) referidos al cuarto trimestre del 2008 y hechos públicos ayer por el Instituto Nacional de Estadística (INE) confirman la caducidad de las estimaciones en la crisis actual y arrojan a la cara del Ejecutivo una cifra tan bochornosa como dramática: la tasa de desempleo al acabar el pasado año fue de casi el 14%, (13,91%). Es la cifra más alta desde el 2000 y unos números que se acercan cada vez más a los lúgubres augurios lanzados desde Bruselas: un 19% de paro para el año 2010.

En un intento por transmitir calma, la vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, afirmó ayer que los malos resultados están dentro de lo previsto, pues «España está inmersa en la peor fase de la crisis económica». Y los datos no dejan resquicio para la duda, ya que en el último trimestre del pasado año el país dejó atrás los veinte millones de ocupados, para situarse en 19.856.800 personas, o lo que es lo mismo, casi medio millón menos que el trimestre anterior y 620.100 menos que doce meses antes, lo que evidencia el ritmo creciente de la destrucción de empleo.

Más de 3.200.000 personas engrosan las filas del paro, cuyo volumen subió un 23,44% sobre el trimestre previo y un llamativo 66,42% interanual. Pero la parte más extrema se la llevan los más de 827.000 hogares españoles en los que todos sus miembros están en paro. Es casi un 30% más que en el tercer trimestre del 2008 y casi duplica la cifra de un año antes, momento en el que en esta difícil situación se encontraban 385.500 familias. A esto hay que sumar también el hecho de que el número de hogares donde todos trabajan (algo más de diez millones) se ha reducido en un año en 596.300 familias.

Consciente del cataclismo suponen los datos de la EPA, el secretario de Estado de Economía, David Vegara, anunció ayer que el Gobierno realizará «un seguimiento de la situación» de los hogares en los que ninguno de sus integrantes tiene empleo por si fueran necesarias «medidas adicionales». De la Vega insistió en ese mismo discurso tras el Consejo de Ministros, reiterando el compromiso del Ejecutivo de «no abandonar a nadie a su suerte».

El número de ocupados ha bajado en todas las comunidades respecto al trimestre anterior, con Cataluña y Andalucía a la cabeza. Igualmente, en términos intertrimestrales, el desempleo subió en todo el territorio nacional, y no perdonó a ningún sector económico, lo que confirma que la crisis, circunscrita inicialmente a la construcción, se ha extendido por completo al resto del tejido productivo. Además, casi 800.000 personas llevan más de un año desempleadas.

En semejante situación, las críticas arreciaron sobre la actuación del Gobierno, que no ha logrado frenar esta histórica sangría laboral. El PP reclamó ya la presencia de Zapatero en el Congreso, y los sindicatos piden que se revise la protección a los más desfavorecidos.