Un 18% de los parques aprobados están fuera del plan eólico vigente

Miguel Á. Rodríguez

ECONOMÍA

Acciona y Aucosa Eólica, las dos firmas más afectadas por ubicar aerogeneradores en áreas no autorizadas

29 dic 2008 . Actualizado a las 02:00 h.

Catorce parques eólicos que suman en total 404,5 megavatios de potencia y que fueron solicitados por 8 de las 29 empresas seleccionadas por la Consellería de Industria deberán aguardar a que se apruebe el nuevo plan sectorial para saber si podrán clavar o no sus molinos aerogeneradores. Son más de los que el propio conselleiro de Industria, Fernando Blanco, admitió durante la presentación de la polémica lista de admitidos a trámite en el millonario concurso del viento. Blanco aseveró entonces que poco más de un 10% de la potencia incluida debería integrarse en el nuevo documento sectorial que su departamento ya está tramitando. Sin embargo, de acuerdo con el plan vigente, estos parques afectados suponen casi un 18% del total de la potencia seleccionada en el concurso (2.290,72 megavatios).

En todos los casos se trata de instalaciones que fueron ubicadas fuera de las áreas que marca el plan vigente, aprobado por la Xunta del PP y que sigue todavía estableciendo los límites del negocio autonómico del viento. Cinco de estos parques tienen parte de su potencia dentro del actual mapa eólico gallego y otra parte a la espera de integrarse en la nueva cartografía. En los nueve casos restantes, la totalidad de los molinos solicitados se sitúan al margen del plan vigente.

La empresa más afectada es Aucosa, el grupo integrado por algunos de los principales grupos conserveros de Pontevedra, entre los que se encuentran Alfageme, Pita Hermanos, Cerqueira, Albo, Thenaisie, la propia Aucosa y Frigoríficos Oia. Cuatro de los siete parques eólicos que le han sido admitidos quedan pendientes del nuevo plan sectorial (Pena de Ferro, Malvar, Monte San Xoán y Chan da Fonte, si bien este último tiene solo una parte fuera del plan vigente). En total, 124 de los 216 megavatios pendientes de adjudicación podrían ser cuestionados.

Acciona es otra de las mayores perjudicadas. Sus tres parques a los que se les admitió una repotenciación de 72,75 megavatios (Mareiro, Labrada y Lomba) están fuera del mapa eólico. Lo mismo le sucede a Hidrofreixa Eólica, que tiene fuera de reglamentación los 17,5 megavatios admitidos a trámite en el parque de Castrelada, el único que le ha sido concedido.

Otros afectados

Inesgal también tiene su parque (36 megavatios en Cabana-Zas) fuera del plan eólico vigente. Y los lusos de Electricidade de Portugal, que en Galicia operan como Neo, tienen afectados parte de sus parques de Salgueiras y Abadín, que mantienen algunos molinos fuera de ordenación y otros dentro de la cartografía actual.

Viraventos Energy tiene una pequeña parte de su parque Serra da Lagoa fuera del mapa y pendiente de lo que suceda con el próximo plan sectorial.

Todas estas firmas energéticas, algunas de ellas nuevas en el sector del viento, deberán aguardar al menos dos años más para despejar el futuro de estos parques afectados. Ese es el plazo estimado para la aprobación del nuevo plan sectorial, que Industria ya ha redactado y sigue pendiente de los informes favorables de los técnicos de Medio Ambiente, Urbanismo y Patrimonio, áreas dirigidas por los socialistas.

El actual PSEG (Plan Sectorial Eólico de Galicia) limita geográficamente las zonas de posible explotación eólica, denominadas Áreas de Desenvolvemento Eólico (ADES). En su día, una buena parte de ellas fueron asignadas directamente a los grandes promotores de los parques (Endesa, Gamesa, Unión Fenosa-Enel, Iberdrola...). Pero otra parte se excluyó como zonas de reserva o de investigación para futuros emplazamientos. Teóricamente, estas últimas tenían una menor calidad de viento. Muchos aspirantes a la nueva eólica han pujado por estas áreas en la convicción de que habría una menor competencia. El 18% de los adjudicatarios están ahora en esta situación.

El nuevo plan sectorial deberá ser aprobado, tras superar todos los filtros de cada uno de los departamentos autonómicos obligados a manifestar su parecer, por el Consello da Xunta. El sábado, el presidente gallego remarcó que el Consello no revisará solo los parques que chocan con el plan eólico vigente, sino todos los concedidos el pasado viernes.