El Superior judicializa el negocio gallego del viento al abrirle la puerta a doce recursos contenciosos
ECONOMÍA
El nuevo reparto eólico terminará en los juzgados sí o sí. Porque ocurra lo que ocurra en el concurso, su génesis, el decreto sectorial aprobado a principios de año, está ya en manos del Tribunal Superior de Xustiza.
Y además, el alto tribunal gallego acaba de agilizar el trámite de otros doce recursos pendientes en el sector del viento. La mayoría de ellos, diez en total, hacen referencia al único reparto eólico firmado por la actual Xunta. En febrero del año 2007, la Consellería de Industria autorizó 511,7 megavatios que completaban planes pendientes de desarrollo. Hubo entonces 11 adjudicatarios y 9 de ellos acudieron al juzgado para quejarse, a los que se sumó también la Asociación Eólica Gallega (EGA). La Sala de lo Contencioso del Tribunal Superior solicitó entonces a la Xunta toda la documentación del proceso. Año y medio después, el juzgado ya tiene todos los papeles en su poder y acaba de abrir un plazo formal para que las empresas se ratifiquen en sus contenciosos.
No son los únicos. Algo similar ocurre con los otros dos recursos anunciados contra la aprobación en febrero del decreto que regula el actual concurso eólico. Endesa y el socio japonés de Acciona (Eurus Energías Renovables) fueron las dos empresas que llevaron el caso a los tribunales. Ahora, el Superior también las ha llamado para ratificarse en sus procedimientos judiciales.
A estos doce recursos se sumarán los anunciados por empresas disconformes con el procedimiento que sigue la Consellería de Industria para resolver el mayor concurso eólico de España. Y con la cascada de iniciativas legales que protagonizarán los afectados por el resultado final.
Esta judialización del sector del viento en Galicia podría llegar incluso a provocar que un juez suspendiese el actual concurso como medida cautelar, algo que los juristas consultados consideran «poco probable, aunque posible».