Fernández Ordóñez se opone a que el Gobierno dé ayudas masivas al sector privado ante la crisis
10 jul 2008 . Actualizado a las 03:50 h.Ahora que el presidente del Gobierno comienza a referirse como crisis a la situación económica que atraviesa el país, los expertos de las entidades financieras españolas dan un paso más y hablan ya de recesión. En estos términos se pronunciaron ayer el Servicio de Estudios Económicos del BBVA, que habló de «crecimiento cero» en el segundo trimestre del año, y Caja Madrid, a través de su presidente, Miguel Blesa, que se refirió a incrementos «nulos» del producto interior bruto (PIB) de abril a agosto, para cerrar el último trimestre del ejercicio con «números rojos».
A tan poco alentador escenario se sumó la estimación de la Fundación de las Cajas de Ahorros (Funcas), que, aunque recortó en medio punto sus últimas previsiones, aún situó el crecimiento para este año en el 1,7%, y en el 1% el incremento del PIB para el 2009.
Ante tan poco alentador horizonte, el ministro de Economía, Pedro Solbes, que el pasado lunes admitió que el crecimiento de abril a junio sería «algo inferior» al del primer trimestre, situado en tres décimas, no quiso ayer pronunciarse sobre las estimaciones del BBVA, alegando que prefería esperar a conocer los «datos oficiales».
En relación a la tormentosa coyuntura económica del país, el gobernador del Banco de España, Miguel Ángel Fernández Ordóñez, se mostró ayer en contra de que el Gobierno saliera al rescate financiero del sector privado ante la crisis.
«Hay problemas que no puede, ni debe, resolver el Ejecutivo», sentenció, advirtiendo que las ayudas, en caso de haberlas, debían ser puntuales, como los préstamos del ICO para las pequeñas y medianas empresas, pero en ningún caso generalizadas. De este modo, Fernández Ordóñez recomendó al sector privado «que se quite cuanto antes esa idea de la cabeza».