La industria gallega también nota ya el parón de la construcción

ECONOMÍA

Galicia es la autonomía que registró el peor comportamiento de este sector en febrero, según el INE

05 abr 2008 . Actualizado a las 02:00 h.

La industria, uno de los bastiones que permitieron a Galicia crecer por encima de la media española durante el pasado año, comienza a perder peso en la comunidad. El índice que mide la producción de este sector, que divulga periódicamente el Instituto Nacional de Estadística (INE), mostró en febrero una caída del 4,5% respecto al mismo mes del año anterior. Se trata del cuarto descenso consecutivo -el declive se inició en noviembre - y, lo que es peor, muestra una dinámica contraria a la del resto del país, donde la producción creció un 3,5% durante el último año. El descenso obedece, en gran parte, a la fuerte caída de la actividad en la energía (un 29% interanual), lo que se explica, en gran medida, por una disminución de actividad de las infraestructuras de generación hidráulica, que se han enfrentado a un ejercicio extremadamente seco.

Este es el factor principal que justifica el mal dato divulgado ayer por el INE y que coloca a Galicia como la autonomía española con el peor comportamiento en el índice de producción industrial (IPI) de febrero. Pero un análisis desagregado por subsectores muestra que la tendencia negativa no solo tiene una explicación de base energética. El sector ha empezado ya a notar el frenazo inmobiliario. Las empresas gallegas que se dedican a las construcciones metálicas, al material de transporte y a la maquinaria -que se engloban en los bienes de equipo - registraron en febrero un descenso de su producción del 1,9%. Se trata también de la cuarta caída interanual consecutiva: en noviembre y diciembre fue del 7,9 y del 1,6%, respectivamente, y en el primer mes de este año, de otro 7,9%.

Los datos que muestra el INE sobre la actividad industrial gallega confirman lo que advertía el Centro de Investigación Económica y Financiera (CIEF) de la Fundación Caixa Galicia en su último boletín sobre coyuntura económica. «As expectativas sobre a tendencia da producción nos próximos meses son pesimistas», decía. Y esto obedece a que el frenazo vinculado a las actividades del ladrillo tendrá su efecto en las empresas que comercializan productos indispensables para la construcción y el equipamiento de los edificios, como los ascensores o las carpinterías metálicas.

Consecuencia lógica

«Nosotros hemos dicho ya en muchas ocasiones que el parón del ladrillo se iba a notar: es normal que la producción industrial caiga», explicaba ayer Juan José Yáñez, gerente de la Asociación de Promotores Inmobiliarios de A Coruña (Aproinco).