El BCE no baja los tipos, pero admite que está preocupado por la economía

ECONOMÍA

Los temores de la autoridad monetaria generaron alarma en las bolsas, que volvieron a caer con fuerza

08 feb 2008 . Actualizado a las 02:00 h.

El Banco Central Europeo (BCE) se ajustó ayer al guión y, como apuntaban todos los pronósticos, mantuvo los tipos de interés en el 4%. La autoridad monetaria dejaba así claro que no está dispuesta a ceder a las presiones de los que claman por un gesto suyo que contribuya a aplacar el nerviosismo de los mercados.

Sin embargo, y a pesar de que insistió en que su prioridad sigue siendo la lucha contra la inflación, dejó una puerta abierta a la esperanza al admitir que existe una «incertidumbre inusualmente elevada» sobre el crecimiento económico. Aunque ambiguo, el mensaje del BCE dio alas a los voces que vaticinan un recorte del precio oficial del dinero en la eurozona antes de que finalice el primer semestre del año. Algunos analistas se atreven incluso a pronosticar que la medida se hará efectiva antes de mayo. Y eso que en la rueda de prensa posterior a la reunión del consejo, el presidente del Banco Central Europeo, Jean-Claude Trichet, afirmó que los «fundamentos» económicos de la zona euro están «sanos».

Trichet reveló también que que el máximo órgano ejecutivo de la entidad no discutió ayer ni una subida, ni una bajada de los tipos. En las reuniones de diciembre y enero algunos de los integrantes del consejo se mostraron partidarios de elevar las tasas.? Con todo, el BCE lleva inmerso en la misma encrucijada desde el pasado mes de agosto, cuando estalló la crisis de las hipotecas basura en Estados Unidos. Por un lado, las presiones inflacionistas inclinan la balanza del lado de una subida de tipos que contribuya a restringir el crédito y a moderar el consumo, y con ello, a frenar la escalada de los precios. Pero, por otro, una decisión de este tipo, en un momento de debilidad económica como el actual, podría acabar provocando una brusca e innecesaria ralentización del crecimiento.

Banco de Inglaterra

El que sí recortó el precio del dinero fue el Banco de Inglaterra: un cuarto de punto, hasta el 5,25%

La puerta abierta a la esperanza por el BCE no fue suficiente para mantener a las bolsas en la senda de la recuperación. Muy al contrario, los inversores vieron en la preocupación del BCE, un motivo más para la alarma. De hecho, la jornada terminó con recortes en todas las plazas del Viejo Continente. Como ya ocurrió el miércoles, el Ibex 35 fue el que mejor se comportó, en esta ocasión sustentado por la resistencia a retroceder posiciones de la que hizo gala Telefónica durante prácticamente todo el día. Al final, el principal indicador del mercado español bajó un 1,13%.

Londres retrocedió un 2,58%, París se dejó en el camino un 1,92% y Fráncfort acabó con un recorte del 1,66%.