El Clínica Deza Xabañús cerró el fin de semana con una de cal y otra de arena. El cuadro lalinense ganó el sábado al Poio por un contundente 31-20, pero el domingo encajó un sonoro 19-32 ante el Seis do Nadal en el encuentro aplazado de la semana pasada. Disputar dos partidos seguidos pasó factura a los de Paco Vilariño, que ante el Poio exhibieron su mejor balonmano, pero frente al Seis do Nadal no aguantaron físicamente.
En el primer partido la lucha se mantuvo hasta los minutos finales, ya que en la ida el Xabañús había perdido de 10 goles, y en el encuentro de vuelta los dezanos querían asegurarse el gol average particular por si acaso finalizan empatados en la pelea por el cuarto puesto. Y es que a pesar de todo, los dezanos todavía tienen opciones de colarse en la fase por el ascenso en la segunda parte del campeonato liguero.
Derrota del Deza
En cuanto al Balonmán Deza, el equipo de Sergio Guerra sufrió una nueva derrota, esta vez a manos del Carballal, el líder, aunque por un resultado más corto del que se podría esperar. Y es que los dezanos perdieron de 23-27, demostrando que se les dan mejor los equipos más potentes. Los lalinenses continúan cerrando la tabla clasificatoria y deberán luchar por la permanencia en la segunda fase de la Liga.
El próximo sábado se juega la última jornada de la primera fase con el Bueu-Xabañús y el Tirso de Molina-Deza.