Julia Vaquero: «La carrera de mi vida ha sido horrorosa y estoy lejos de la meta»

La Voz

DEPORTES

Después de once años, la guardesa trata de superar un trastorno bipolar

17 may 2011 . Actualizado a las 06:00 h.

Julia Vaquero lleva once años disputando la carrera de la vida. Una década luchando por salir del túnel del trastorno bipolar. A los 40 confiesa que está aprendiendo a quererse. También que divisa a lo lejos la meta, aunque no termina de creérselo. Durante este tiempo no ha podido incorporarse al mundo laboral y los ingresos del atletismo siguen siendo su método de sustento. Aislada en A Guarda, ayer volvió al primer plano en las distinciones de la Xunta.

-¿Once años después mantiene relación con el deporte?

-Estuve parada durante bastante tiempo, pero ahora en primavera he vuelto a empezar y estoy corriendo en populares de los alrededores. Durante esta etapa que estuve apartada he ido creciendo como persona.

-¿Cómo ha sido la carrera de la vida?

-La carrera de mi vida ha sido horrorosa y todavía estoy lejos de la meta. Estoy descubriendo cosas de mí y pienso que muchas de ellas ya las he superado y otras se van a superar. Sé que todo depende de mí, pero tenía que pasar una serie de experiencias y ver lo que es el mundo real. Vivía en una burbuja cuando hacía deporte y luego me resultó bastante difícil adaptarme a la vida normal.

-¿Fue un impacto para usted dejar el deporte?

-He tenido una relación de amor-odio. Yo agarré el deporte como mi forma de vida y ahora estoy descubriendo que necesitaba respuestas, y saber muchos porqués, porque los médicos me dicen que tengo trastorno bipolar, pero yo no me conformo con eso, sé que hay algo más. En el mundo del deporte me he sentido utilizada, porque persigues una marca y te olvidas de la persona que eres.

-¿Cómo llegó a esa situación?

- Yo tuve una infancia muy difícil y dolorosa, con mucho sufrimiento, y el deporte fue la válvula de escape, mi droga, pero hay heridas que no curé que han resultado demasiado dolorosas.

-¿Y ahora que significa el deporte para usted?

-Ahora estoy usando el deporte como terapia y la verdad es que me está ayudando. Al mismo tiempo me estoy rebelando. Digo: cómo me voy a medicar, porqué tengo que tomar pastillas. Hace mucho tiempo que pensé que salía del túnel, unas veces estoy bien, otras retrocedo y voy así. Ahora me refugio en el deporte, para olvidar, para superarlo, para meditar. Llegué a repudiar el atletismo pero estoy intentando hacer las paces, porque le debo todo lo que soy.

-¿Ha accedido al mundo laboral durante este tiempo?

-No estoy trabajando, sobrevivo con lo que gané en el deporte pero todo se acaba, aunque la verdad gané mucho, pero también me divorcié y ahí hubo que repartir. Mi vida no es como muchas piensan, sino que he tenido que dejar muchas cosas atrás. Ahora mismo no me siento capacitada para trabajar. Necesito más fuerzas y energías y antes de nada tengo que solucionar este conflicto personal.

-¿Le apetece ser entrenadora o transmitir sus conocimientos?

-Con niños podría ser porque me gusta el deporte como medio para conocer tu cuerpo y hacer ejercicio, pero no como entrenadora porque conmigo fueron muy estrictos y muy rígidos y me fastidiaron mi infancia y yo no conseguía imponerme y decir que no, algo que a mí siempre me ha costado muchísimo, pero es muy importante saber decir que no, poner límites y que te respeten.

-¿Mantiene relación con la gente de su época?

-No porque yo estoy aislada en A Guarda, muy a gusto, en un sitio en donde salgo a entrenar y escucho cantar a los grillos, a los pájaros. Esto para mí es fundamental. Ahora intento aislarme, porque estoy comenzando a conocerme, a aceptarme y a quererme, porque no me quería nada y ahí está parte de la clave de mis problemas.

JULIA VAQUERO MEJOR ATLETA GALLEGA DE TODOS LOS TIEMPOS