El cordobés se lanza a destapar «el virus» del equipo
04 mar 2011 . Actualizado a las 06:00 h.A tumba abierta. Rafa Sanz, el entrenador del COB, está revelando a lo largo de esta semana «lo que toda España sabía» sobre los verdaderos males del club ourensano. El porqué un equipo con presupuesto de mitad de tabla, que está al día en los pagos y que está apoyado en las gradas por unas tres mil personas de media es colista en la LEB Oro. Su predecesor, Paco García, lo insinuó cuando fue cesado pero no se atrevió a decirlo públicamente como ahora sí está haciendo el técnico cordobés, que dice de sí mismo que ha tenido que venir desde mil kilómetros de distancia «para decir las verdades del barquero».
La verdad sobre la corrupción que afecta a un equipo, en el que Sanz revela que «hay gente que se ha beneficiado de la buena voluntad de personas que se han fiado de gente indeseable y no son ni uno ni dos». El entrenador no dice nombres todavía, pero ya avisa que los culpables saldrán en la foto del descenso, las «ratas que ya se han querido tirar del barco, en el momento que descendamos estarán en el campo».
Lo que tiene dentro el equipo cobista es «un virus», por eso solo realizó un cambio de los dos que quedaban cuando fichó por Ourense, porque «si me cargaba a uno me tenía que cargar a cinco», dijo después de perder con el Obradoiro. Maldice la hora en que vino y perdió treinta días. Ya no parece dispuesto a perder más tiempo. Tirará del equipo con los «tres o cuatro jugadores que han tenido honor y corazón», como ante el Obradoiro. A los «no profesionales, los que no tienen ética, les pondré el pie en el cuello».
Podría haberse ido, pero entonces sería dejar otra cabeza de entrenador en la bandeja. Algo que otros técnicos también oyeron antes de tener que irse, el «antes que tú estuvieron otros, otros vendrán y aquí sigo yo». Pero Sanz no traga, está dispuesto a morir matando y con dignidad.
rafa sanz técnico del Club ourense baloncesto