«''¿Vienes sola? Estás loca'', me dijo la persona que me recibió, que era otra mujer»

La Voz

DEPORTES

10 ene 2009 . Actualizado a las 02:00 h.

Después de 59 días de soliloquios, una de las cosas que más ha agradecido Chus Lago ha sido poder hablar con otras personas, «con algunas incluso en español», según dice.

-¿Cómo fue el momento de la llegada?

-Tenía visión doble por uno de los ojos. Me pareció descubrir dos máquinas quitanieves que, en realidad, eran una. Fue como una película de ciencia ficción. Aquella máquina se iba acercando. Se bajó una persona y me pregunto: «¿Vienes sola?». Le dije que sí y entonces no paraba de repetir «estás loca, loca, loca». Era otra mujer. Me gustó esa imagen de dos mujeres en este blanco escenario.

-¿Es todo como se lo imaginaba?

-Más o menos. Lo que no sabía es que hubiera aquí tanta gente. Durante el verano en la base viven 240 personas entre científicos, técnicos, operarios... Es como una ciudad diminuta. Hay biblioteca, sala de recreo, de ordenadores... Y hasta jardín botánico, donde cultivan algunos vegetales que luego incluyen en la dieta. Por ejemplo, lechugas.

-¿Hay algún español?

-Que yo sepa, no. Hay americanos y suizos. Lo que sí hay es alguna persona que habla español.

-Serán muy hospitalarios.

-Mi llegada coincidió con uno de los turnos en el comedor. Me invitaron a un café con leche, pero a ninguno se le ocurrió en el momento que podía tener necesidad de un plato de comida consistente.