La prensa nacional se hacía eco en su edición de ayer de las irregularidades de Ramón Calderón en la dirección del Real Madrid, en el análisis de la última jornada de Liga. Con un artículo titulado Manchas en el escudo, David Gistau escribía en el periódico El Mundo que «el Real Madrid va a ganar la Liga por segundo año consecutivo. Sin embargo, el porvenir se presenta deprimente. Y es así porque incluye a Ramón Calderón».
El diario madrileño explica en la misma pieza que «es la imagen institucional del Real Madrid la que está quedando como una escombrera sin que a nadie le importe». «Porque Calderón, empezando con las sacas y acabando con el escándalo de los compromisarios, ha impuesto la corrupción de tal forma que el club ya recurre a mecanismos internos para protegerse de él y de esa cohorte de rasputines de huevo Kinder, como Carrascosa, que parapetados como advenedizos en el palco manejan los hilos del poder como en el póster de El Padrino, pero en cutre», dice Gistau.
Tufo gansteril
«Hay quien todavía cree que la polémica en el Madrid la alimentan el mal juego o las mentiras electorales -si viene o no Kaká- cuando lo lamentable es el tufo gansteril de quien cree que ser señor consiste en que se vea la marca de sastre», concluye David Gistau.