Accionistas de clubes de fútbol ven «inmoral» el sueldo de Lendoiro

DEPORTES

30 ene 2008 . Actualizado a las 02:51 h.

La Federación de Accionistas y Socios del Fútbol Español (Fasfe) se presentó ayer en Madrid con la descripción de un mapa de la situación de los clubes de fútbol, en el que el Deportivo figura como una de las entidades peor gestionadas y con menor transparencia a la hora de presentar sus cuentas a los accionistas. La recién nacida organización agrupa de momento a siete asociaciones de accionistas del Atlético de Madrid, Albacete, Real Betis, Sevilla y Real Zaragoza. Otros ocho grupos, entre ellos la Plataforma por un Deportivo Permanente y Transparente que impulsó la junta extraordinaria del pasado mes de junio, han iniciado ya los trámites para entrar en Fasfe.

El presidente de la asociación y ex máximo dirigente del Zaragoza, José Ángel Zalba, criticó duramente los elevados sueldos que perciben los directivos de los clubes convertidos en sociedades anónimas. Y, en referencia concreta a la nómina de Lendoiro, Zalba calificó de «inmoralidad» el hecho de que el presidente del club coruñés perciba el 1% del presupuesto de la entidad en concepto de sueldo. La situación es especialmente grave, según dijo, en aquellas entidades en las que, como en el caso del Deportivo, lejos de generar beneficios, se encuentran en una situación de práctica «ruina» con un volumen elevado de deuda.

José Ángel Zalba explicó que, en todo caso, podría admitirse que un directivo que levante un club y le haga producir beneficios cobre un sueldo en proporción a lo que genera, pero, en caso de pérdidas y deudas, cobrar esas nóminas es algo «vergonzoso».

Apoyo jurídico

Los representantes de Fasfe aludieron a la falta de transparencia de las cuentas del Deportivo, en consonancia con lo denunciado por diversos accionistas del club coruñés, y señalaron que desde su asociación se prestará ayuda jurídica a los socios y accionistas que lo soliciten para denunciar este y otros casos ante la Justicia. En lo que afecta a la actuación de Lendoiro en el Deportivo, Fasfe considera que el caso estaría ganado en los tribunales con toda seguridad.

Otro de los objetivos de la nueva asociación es que los partidos políticos dejen de subvencionar indirectamente con dinero público a los clubes o que, como a su juicio ocurre con el PP en Valencia o con el PSOE en Zaragoza, los partidos dejen de controlar directamente a su antojo los equipos. Por ello, exigen a los políticos que durante la campaña electoral muestren clara su postura en torno a la financiación de los clubes de fútbol.

Entre los fines declarados de la agrupación está la defensa de los intereses de los aficionados y accionistas, el fomento del asociacionismo entre las aficiones, la potenciación de la función social del fútbol, el cumplimiento de las obligaciones de los clubes para con sus comunidades, y fomentar la participación de los aficionados en la propiedad y la administración de los equipos, promoviendo su presencia en los órganos de gestión.

Pero por encima de todo, su objetivo es conseguir la derogación de la actual Ley de Sociedades Anónimas Deportivas, que juzgan «fracasada», de manera que haya más transparencia y se vuelva a una situación en la que los clubes sean propiedad de los socios y sus directivos sean elegidos de manera más democrática.