«En Tokio también hay calamares y pulpo»

La Voz

CULTURA

12 mar 2009 . Actualizado a las 02:00 h.

«Tokio es un lugar muy distinto a este, aunque allí también hay calamares y pulpo». Así explicó Haruki Murakami sus sensaciones al llegar a Compostela. «En Tokio, además, hay mucho más ruido». El escritor explicó en el Casino que su historia era sencilla: «Tuve un club de jazz en Tokio y era feliz porque podía escuchar música todos los días y a todas horas». Cuando el escritor cumplió 33 años hubo un cambio: «Nunca había escrito antes, pero me entraron ganas y me lo publicaron. Fue así de fácil». Con la misma sencillez se puso a correr maratón: «Es un deporte que hay que afrontar solo, a mí me gustar estar solo y por eso me puse a correr, con naturalidad, de la misma manera que me puse a escribir, aunque no sé si tengo un don para hacerlo». Para el autor de After Dark, estos son días tranquilos porque acaba de entregar a su editor japonés un nuevo libro. No explica su contenido, pero asegura que «es una obra larga, escrita a lo largo de los últimos dos años». Será publicada en Japón en mayo y, según el escritor, aún no hay fecha para la traducción al gallego, «porque es una obra muy extensa y no sé cuánto tardarán en traducirla». El escritor aseguró que se encontraba feliz porque había acabado su trabajo de dos años y explicó que, de otro modo, «no podría estar aquí, perdería la concentración precisa, pero ahora [la obra] está acabada y entregada», y Murakami puede disfrutar «de estar en Santiago». El escritor japonés, junto con Luis Landero, Molina Foix y Anxos Sumai, participará a lo largo del día en las actividades que el Rosalía de Castro desarrolla alrededor del San Clemente.

Murakami explicó en el Casino que acababa de llegar de Tokio, donde le había pasado una historia curiosa cuando viajaba en el metro. «En el fondo del vagón había una chica guapa que me estuvo mirando un rato, luego se acerco a mí y me preguntó si yo era Murakami, le dije que sí mientras pensaba: hay días buenos. Luego me dijo que el libro que más le gustaba era mi primer libro y que, desde entonces, había ido empeorando. Entonces pensé que había días malos», contó. El escritor advirtió a la concurrencia que su próximo libro «será el mejor» de todos los que lleva escrito. Quizá haya más días buenos.