En la Facultad de Informática coruñesa se celebra un seminario de series japonesas, que equivale a un crédito de libre configuración
15 may 2008 . Actualizado a las 11:47 h.Se acabó lo de escuchar aburridas conferencias y ponencias interminables sobre temas que no interesan nada a los universitarios, y que solo les sirven para conseguir un mísero crédito de libre configuración (cada estudiante tiene que reunir una media de 30 créditos durante su carrera). Ahora, lo que se lleva es organizar seminarios y cursos que atraigan la atención de los jóvenes, y en la facultad de Informática de A Coruña han encontrado la fórmula para hacerlo.
Estos días se celebran las terceras jornadas Anime , término que sirve para agrupar a las series de dibujos animados de procedencia japonesa, y a las que se han apuntado cerca de 350 estudiantes de distintas titulaciones. Jorge Diz, uno de los organizadores, recuerda que para comprobar el tirón que podía tener este curso colgaron solo dos carteles, y «en un solo día» ya tenían 90 preinscripciones. Proyecciones de películas y de series animadas realizadas en Japón se sucederán durante las tres tardes que dure el seminario -de 16 a 21.30 horas-, que tiene como punto fuerte la visita de Marc Bernabé y Verònica Calafell, dos expertos en los Anime , que además han traducido varios cómics manga japoneses.
Distintos géneros
Diz recuerda que gracias a esta conferencia de los dos especialistas se pudo dar un poco más de contenido a las jornadas, y conseguir el crédito de libre configuración, «que en ediciones anteriores incluso llegó a ser un crédito y medio», apuntó, al mismo tiempo que recordó que se tocarán todos los géneros conocidos de los Anime , y se repartirán además un gran número de regalos entre todos los asistentes.
Precisamente, este último motivo fue lo que animó a Álex Batista a acudir ayer disfrazado como uno de los personajes de la serie Naruto , en concreto, de Itachi Uchiha, ya que en la página web de las jornadas se decía que aquellos que acudieran caracterizados (es decir, como cosplay ) tendrían más posibilidades de ganar algún premio. «El traje me lo compré en Internet, y me costó 30 euros, ya lo usé también en Halloween», explicaba este fan de los dibujos animados japoneses, que es alumno de Informática.
También Cristina Martínez, eligió el mismo personaje para disfrazarse, aunque ella se hizo el traje a medida, y ya le ha servido para dos carnavales. Ambos afirman que, cuando se enteraron de la celebración de estas jornadas, no tardaron dos minutos en ir corriendo a apuntarse; «y si además te dan un crédito de libre configuración, y un regalo, mejor que mejor», dicen.