La escasa capacidad de las vías de acceso dificulta el tráfico rodado
10 dic 2011 . Actualizado a las 06:00 h.El Ayuntamiento de A Coruña presentó ayer el plan especial de tráfico que se pondrá en funcionamiento durante las próximas fechas navideñas. Los conductores consultados tienen esperanza en que el esfuerzo que va a realizar el gobierno municipal «pueda, no eliminar, pero, al menos, reducir la problemática de la circulación en esta ciudad».
Estos conductores confían que se puedan mejorar los problemas de tráfico que se vivieron ayer durante toda la tarde en las vías de acceso y en las calles interiores de la ciudad para justificar sus dudas. El caos circulatorio se concentró, sobre todo, en la avenida de San Cristóbal. Aquí se originaron retenciones y colas que se extendieron hasta la entrada en la autopista AG-55, que une A Coruña con Carballo, tanto en sentido entrada como salida de la ciudad.
La aglomeración de vehículos fue más intensa en la carretera de Baños de Arteixo, a su paso por la glorieta de Ikea. Y también fueron muchos los problemas en el tráfico rodado surgidos en la glorieta de Eduardo Diz, dificultades que por efecto dominó se extendieron a la avenida de Arteijo, y por proximidad, a la ronda de Outeiro y a la avenida de Finisterre.
AP-9 y N-VI
La avenida de San Cristóbal también fue incapaz de absorber con fluidez el volumen de coches durante toda la tarde de ayer, tanto en sentido Alfonso Molina como en dirección la Grela. Y lo mismo ocurrió en Alfonso Molina, en los dos sentidos, concentrándose los problemas en esta vía en el tramo que permite los desvíos hacia Pocomaco, Matogrande y San Cristóbal.
En la salida de la autopista AP-9 también se registraron importantes retenciones, que llegaron hasta el kilómetro 3. También se congestionó la N-VI en Perillo. Y lo mismo ocurrió en el puente de A Pasaxe, sobre todo en el acceso a esta carretera desde Santa Cristina.