El lienzo de la calle Real sigue a la espera de que los técnicos de la Consellería de Cultura lo revisen

La Voz

A CORUÑA

29 oct 2010 . Actualizado a las 02:00 h.

Unos 50.000 euros cuesta sanar los males que sufre el mural que Urbano Lugrís pintó en el local de la calle Real que ahora ocupa el café Vecchio. Esa es la valoración que han hecho los técnicos del estudio Mas Arquitectura que se han planteado evitar que continúe la degradación de este mural, ya cercenado en su día por las obras de reforma del local cuando dejó de ser la sede de una entidad bancaria y pasó a acoger otros usos.

En los últimos meses los distintos organismos oficiales se han ido pronunciando sobre el deterioro del mural, después de que el mismo fuera denunciado por el ex ministro de Cultura, César Antonio Molina. Para el alcalde de la ciudad, Javier Losada, la obra de este artista debe conservarse, si bien, según afirmó, el Ayuntamiento no tiene competencias sobre esta tarea.

En el mismo sentido se expresó la concejala de Cultura, María Xosé Bravo, indicando que desde su departamento se había planteado, hace algún tiempo, la posibilidad de sacarlo de su actual emplazamiento y trasladarlo a un museo «pero as persoas que consultamos dicían que perdería moita visibilidade».

También el conselleiro de Cultura, Roberto Varela, se pronunció sobre el asunto, anunciando que técnicos de Patrimonio, dependientes de su departamento, comprobarían el estado del mural con el fin de determinar las medidas necesarias para su conservación. Esta visita todavía no se ha producido. Mientras tanto, la asociación cultural formada para salvar este mural continúa con los contactos para encontrar fondos para el proyecto.