De la vibrante trompeta de Simeó a los violines de «Scheherezade»

La Voz

A CORUÑA

27 ago 2010 . Actualizado a las 02:00 h.

La Orquesta Joven de la Sinfónica de Galicia volvió a encandilar ayer al numeroso público que ocupó las sillas de la plaza de María Pita a pesar de lo desapacible de la noche. Especialmente vibrante resultó la actuación de uno de los casi noventa jóvenes que estaban sobre el escenario, el trompetista Rubén Simeó, que a pesar de su juventud ya está considerado como uno de los mejores intérpretes de trompeta de todo el mundo y lo demostró en su interpretación del Concierto para trompeta y orquesta, de Franz Joseph Haydn.

Y en la segunda parte, antes de las propinas ofrecidas por la Joven Orquesta, el protagonismo fue para los siempre emotivos violines que interpretaron una de las piezas más populares del compositor ruso Rimski-Korsakov, Sheherezade.