Alberto Soto es de esas personas que no se conforman con disfrutar el ciclismo, también quiere compartir su pasión con todo aquel que se sienta identificado con él. Es por ello que acaba de estrenar cargo como presidente del Club Ciclista de Arteixo.
-¿Cómo terminó siendo presidente de un club ciclista?
-Nosotros llevábamos el MB3 y desde el Concello nos ofrecieron llevar este club. Es el primer año que lo hacemos.
-¿Cuánta gente forma parte de esta asociación?
-Ahora somos treinta personas, pero si la gente quiere se pueden ir federando a lo largo del año.
-Creo que están especializados en ciclismo de montaña...
-Sí, así es. El ciclismo de montaña te permite el contacto con la naturaleza, además te sube la adrenalina, hacer ejercicio y compartes una afición con los amigos. ¡Qué más se puede pedir! [se ríe]
-Pero me imagino que todos los que están federados serán deportistas, no aficionados...
-Hay de todo. Hay gente que le gusta competir, como yo que hago lo que puedo y hay gente que se toma el ciclismo como si estuviese haciendo turismo de montaña.
-Y el ciclismo de descenso, ¿tiene muchos adeptos?
-Sí, hay gente a la que solo le gusta hacer descensos. Tanto es así, que en el club tendremos una sección de descenso. Además, en colaboración con el Ayuntamiento de Arteixo, tenemos previsto inaugurar un circuito en el municipio el 28 de abril. Aunque no puedo adelantar mucho más.