El concejal de Vivenda, Mario López Rico, acusó ayer al Partido Popular de estar detrás del conflicto vecinal surgido en El Ensanche, después de que la asociación de vecinos anunciase medidas callejeras para intentar evitar el vandalismo asociado a los after-hours de la calle Joaquín Vaamonde.
Preguntado por su opinión sobre el asunto, López Rico calificó la iniciativa de la asociación de «comportamento fascista». Afirmó que es la policía la que tiene que garantizar la seguridad y confió en que a los vecinos «non se lles ocorra saír á rúa e facer dano a alguén, porque se lles caerá o pelo». En edil nacionalista añadió: «Detrás de estas actitudes está o Partido Popular, que nos momentos de crise sempre fomentan estas situacións. Non quero comparar isto -dijo- con Franco, Mussolini ou Hitler».
Las declaraciones de López Rico tuvieron una rápida respuesta por parte del Partido Popular y de la asociación El Ensanche. El portavoz del PP, Carlos Negreira, lamentó que el Ayuntamiento «intente despistar, porque lo que tiene que hacer es dejarse de buscar excusas y abordar el problema de seguridad ciudadana». Negreira recalcó que «López Rico nos ha demostrado que es un concejal instalado en el siglo XIX, y que si quiere dar una solución que la ponga encima de la mesa, que para eso le pagan los coruñeses, y no para que les riña a los vecinos».
Derecho democrático
El líder del PP recordó que el partido se opone a las brigadas ciudadanas, aunque comprende la «desesperación» de los vecinos, y censuró que «cualquier movimiento vecinal que se produce en la ciudad siempre es rebatido por el gobierno local acusando al PP de estar detrás, como si los ciudadanos no tuviesen el derecho democrático a manifestarse y a expresar públicamente su opinión».
Por su parte, el presidente de la asociación El Ensanche, Gerardo Crespo, valoró que los responsables municipales «no admiten la crítica y no saben dialogar; eso sí es un ejemplo de intolerancia integrista». Crespo señaló que la directiva de la entidad estudiará querellarse «por las amenazas recibidas por parte de los dirigentes municipales y por parte de la presidenta de la Federación de Vecinos, Luisa Varela, que sigue las directrices del Ayuntamiento».
El portavoz del Ensanche apunta que el alcalde les transmitió muestras de apoyo en anteriores ocasiones, «pero ahora que no tenemos una solución a nuestro problema de seguridad, somos fascistas», dice. Y afirma, dirigiéndose a Javier Losada: «Iremos hasta el final, porque no vamos a admitir la desprotección de los vecinos. Buscamos el orden, la paz, la seguridad y el derecho al descanso, y si nuestro Ayuntamiento busca lo contrario que lo diga».
El Ensanche ha convocado una reunión para el próximo martes, en el hotel Hesperia de Juan Flórez, a las ocho de la tarde, en la que se decidirán las medidas a adoptar contra el vandalismo en Joaquín Vaamonde.
El alcalde, Javier Losada, se refirió ayer en Radio Voz a todo este tema. Afirmó que dos locales de esa calle se cerraron por carecer de licencia y, tras las críticas por la «connivencia con los pubs», vertidas por la Federación Salvador de Madariaga, animó a presentar pruebas. «Si es verdad -señaló Losada-, tomaremos medidas, y si es mentira, esa entidad tendrá que rectificar».
El presidente de la Federación Salvador de Madariaga, Juan Chas, mostró ayer a La Voz tres denuncias interpuestas en el último año contra un local de la Marina, donde se constata el incumplimiento de la ley de ruidos, y el establecimiento sigue abierto. En las alegaciones, el propietario de la cafetería expone que la insonorización es defectuosa por unas obras realizadas en el edificio.