Un acusado de violar a su novia declara que lo denunció por revancha

S. Basterrechea A CORUÑA

A CORUÑA

XOSÉ CASTRO

La joven dijo que el procesado, que se enfrenta a 17 años de cárcel, era celoso y violento Aseguró que quería romper la relación porque ella le ocultó que tenía hepatitis C

13 abr 2005 . Actualizado a las 07:00 h.

A.?P.?Ch., de Valladolid, y S.?M.?A., coruñesa, se conocieron en unas vacaciones en Punta Cana (República Dominicana) y regresaron a España como novios. Él se trasladó desde su ciudad, consiguió un trabajo de comercial y comenzaron a vivir juntos en un piso de la avenida del Ejército. Tres meses después, la relación se rompió. Ayer, el joven se sentó en el banquillo de la sección segunda de la Audiencia acusado de dos delitos de agresión sexual y otros tantos de violencia doméstica, por los que el fiscal le pide 17 años de cárcel, cuatro menos de los que solicita el abogado de la chica. Según mantienen las acusaciones, en la noche del 10 de agosto del 2004, ella le comunicó que quería dejarle. El acusado comenzó a romper enseres y a golpear muebles. Cogió un cuchillo, lo clavó en la puerta y se lo puso después en la cara, al tiempo que le decía que él no era un pelele y que se le iban a cruzar los cables. La agarró del pelo, la golpeó y la llevó al dormitorio. Bajo amenazas de muerte a su familia, ella accedió a tener relaciones sexuales. A la mañana siguiente, siempre según la acusación, la obligó a llamar a la peluquería en la que trabajaba con su hermana mayor, para decir que no se encontraba bien ya que podía estar embarazada y que iba al médico. Luego la llevó a su trabajo, en el Monte Xalo, y volvió a obligarla a mantener relaciones en el coche. De vuelta a casa, el acusado advirtió que la madre de su novia había estado allí, por lo que salió con la joven a comprar una cerradura, para después ir juntos a buscar una casa nueva por Cambre, Carral y Oleiros donde, en un descampado, la obligó a bajar del vehículo y la golpeó. A. P. Ch. se declaró inocente. Aseguró que la noche del 10 de agosto estuvo hasta altas horas de la madrugada con su jefe tomando unas copas en O Burgo y que al día siguiente ella quiso acompañarle al trabajo. «Yo quería romper con ella porque me había dicho que tenía hepatitis C y que era por inyectarse cocaína. Íbamos en el coche y me pidió que siguiéramos con la relación aunque fuese viviendo separados», dijo. «Me dijo que estaba muy mal y que había vuelto a pincharse. La agarré del brazo para mirar, empezó a pegarme, paré el coche, bajamos y en la discusión le di un rodillazo», añadió. Ese golpe fue el único que el hombre reconoció haber propinado a su novia. Atemorizada Ésta, por su parte, declaró que no pidió ayuda por miedo y que durante el trayecto en coche él pinchaba su asiento con una navaja. Además, aseguró que su ex pareja era una persona celosa, autoritaria y violenta, que le impedía ver a sus amigos y familiares. «Era de los de ponte ese vestido, ése no, y mete la barriga. Me decía que sólo nos teníamos el uno al otro», dijo. Uno de los testigos de la defensa, que acudió al piso de la pareja a recoger ropa para A.?P.?Ch., manifestó que la chica le dijo que había denunciado a su novio por revancha: «Dijo que quería que estuviese unos días en la cárcel, que le pidiese perdón y ella retiraría la denuncia».