Numerosos ejemplos de las vidas largas

La Voz

CORISTANCO

29 sep 2011 . Actualizado a las 06:00 h.

El caso de María es excepcional en la Costa da Morte. Al menos que exista constancia, es la primera vez en la historia que un vecino de la zona alcanza los 110 años.

No obstante, y sin llegar a esos extremos, en la comarca siempre ha habido casos de gran longevidad, con varios ejemplos de 107 años. Uno de los más conocidos fue el de Carmen Ogando Ferreiro, a la que le faltaron solo ocho días para llegar a los 108 años, en febrero del 2000. Carmen era de Vilastose, pequeña parroquia de Muxía de unos 400 habitantes que ha dado numerosos casos de centenarios y nonagenarios. Entre ellos, las tres hermanas de Carmen: Manuela, Dorinda y Generosa, todas con 100. Hay otros ejemplos notables, y solo hace falta darse una vuelta por el pequeño cementerio para comprobarlo.

María Marcote es la mayor de la zona desde hace algo más de cinco años. Antes se fueron sucediendo otras. Dolores Suárez Blanco, de Mira (Seavia-Coristanco), lo fue durante bastante tiempo. Se fue en enero del 2006, con 106. A la misma edad falleció, en septiembre del 2001, María Maroñas Mira, de San Cremenzo de Pazos (Zas). A esta la sucedió María Ramos Caamaño, de Cambeda-Vimianzo, que falleció el 19 de diciembre del 2001, a muy pocos días de los 107. Hasta los 105 llegaron varias. Como Josefa Canto, de Corme, fallecida en el 2009.