Los hosteleros de Fisterra no se unen para atraer turistas

e. e. cee / la voz

CARBALLO

Solo 6 de 50 acudieron a una reunión convocada por APTCM en la localidad

12 jul 2011 . Actualizado a las 06:00 h.

Hace dos semanas el Concello de Fisterra se puso en contacto con la Asociación de Profesionais do Turismo da Costa da Morte (APTCM) para tratar de acabar con un problema endémico: el paso efímero de los turistas por el municipio.

La idea era lograr lo tantas veces soñado: que los visitantes que llegan al cabo Fisterra, que son miles, bajen después a la localidad en lugar de emprender directamente el viaje de vuelta.

Con ese fin, la asociación convocó por carta a 50 empresarios del sector del municipio. Pensaban, explicó el presidente de APTCM, Manuel Pan, crear algún tipo de folleto con información de los empresarios que se sumaran que se podría distribuir en el faro para animar a los visitantes.

Al final, la entidad no va a hacer nada en Fisterra. No por falta de ganas desde la asociación, sino por falta de entusiasmo de los, en teoría, máximo interesados en lograr el fin propuesto.

De los 50 convocados, solo 6 acudieron a la cita con APTCM. «A conclusión é que o sector ten pouco interés en mellorar a atención turística e nós non somos capaces de darlle unha solución a iso, de implicalo», decía ayer Pan tras el breve encuentro con el puñado de empresarios.

Cuenta Pan que APTCM, con 150 socios, solo trabaja para las empresas que quieren colaborar, no para las que no están interesadas. Fue el segundo intento realizado en el municipio en los últimos años y, de nuevo, con idéntico resultado. Mejorar la atención a los turistas en el faro será ahora cuestión de otros, si quieren ponerse manos a la obra, pero no de APTCM.

La entidad, por otra parte, ha convocado a todos los empresarios del sector de la Costa da Morte mañana, a las cinco y cuarto, en la casa da cultura de Vimianzo. La reunión está abierta a todos y tiene un objetivo bien concreto, poner en funcionamiento el Consorcio de Turismo de la Costa da Morte.

Para ese proyecto largamente gestado y largamente aplazado, disponen de un fondo de 90.000 euros al año si se mantienen las aportaciones aprobadas en su día por los ayuntamientos. Tras hablar con los empresarios tocará ronda de reuniones con las asociaciones de la zona -GAC, GDR, Neria y otras- antes de ponerse a funcionar. Esperan, eso sí, despertar un mayor entusiasmo entre sus colegas del sector.

una cita fallida