Han hecho públicas sus protestas por activa y por pasiva. Individualmente, pero en contacto. Por eso, y ante la falta de una solución que ellos entenderían factible para sus problemas, se han unido para informar de que no han recibido una respuesta por parte de la Consellería de Educación. Las ANPA de los institutos de A Pedra da Aguia (Camariñas) -que no pudo estar presente, pero sí se escuchó su situción a través de los demás-, del Agra de Raíces ceense (que representaron Josefa Díaz y Rosa Canosa) y la del Agra de Leborís de A Laracha (a través de María del Carmen Recarey y Xosé Antón de la Fuente Subiela) expusieron ayer en Carballo su malestar por el recorte de profesorado que han sufrido sus centros.
La ANPA camariñana todavía está a la espera de una reunión con la jefa territorial de Educación, para la que ayer ni siquera tenía cita. La ceense la mantuvo ya hace casi dos semanas, una más de la que le dieron para ofrecer una respuesta y una nueva organización para este curso. «Dixéronnos que, analizada a situación, nos sentariamos Inspección, dirección e pais para falar, pero a día de hoxe, cinco días fóra de prazo, aínda non temos resposta». El colectivo de padres larachés trasladó en la rueda de prensa de ayer que los alumnos que integran su instituto (además de ser el único de la localidad, como en los otros dos casos) son de muy diversa procedencia y necesidades. «Pero non atenden a iso, tratan os rapaces coma se fosen números, e só saben dicir que non se chega aos 30 alumnos por aula que marca como máximo a LOE». «Só un goberno irresponsable se comporta así coa educación. Isto só se entende se o seu obxectivo é asasinar o futuro dos nosos fillos», sentenció Xubiela. «Eles -coincidieron todos- son os que están planificando o fracaso educativo dos rapaces»