Padres y docentes del Agra de Raíces rechazan el recorte de profesorado

Katy Lema CARBALLO/LA VOZ.

CARBALLO

21 sep 2010 . Actualizado a las 02:00 h.

Decenas de padres se concentraron ayer a las puertas del IES Agra de Raíces de Cee bajo el lema «Non ao recorte do ensino público na Costa da Morte». Los 460 alumnos del instituto ceense se han quedado sin seis profesores para este nuevo curso, una cifra que se opone al aumento de la matrícula en 15 alumnos. El pasado viernes recibieron la visita de una inspectora, que en nombre de la Consellería de Educación obligó a la dirección mediante una circular a reunificar las clases y elevar el ratio a 30 alumnos por clase, circunstancia que ni los padres ni los profesores entienden. Josefina es la tesorera de la ANPA, y ayer a partir de las seis de la tarde, encabezó una concentración en la que aseguró: «Sentímonos discriminados, a consellería ten que recapacitar, non poden falar de fracaso escolar e actuar así».

Como portavoz del ANPA, Josefina confirmó: «Imos adoptar medidas de forza, faremos unha asemblea de pais e reunirémonos cos demais institutos da zona». Los profesores también mostraron su apoyo en la concentración a padres y alumnos. Muchos de ellos entienden estas medidas «incoherentes coa calidade educativa». Lo cierto es que las últimas decisiones han dejado varias optativas sin profesor y asignaturas clave como inglés contarán este año con una nueva baja, eliminando la posibilidad de llevar a cabo las clases de conversación. El director y profesor de inglés, Lois García Carballido, fue contundente al asegurar: «Piden que os rapaces sexan bilingües pero así é imposíbel».

El director aseguró que estos últimos meses han sido una pesadilla. Ayer trabajaban por segunda vez en un nuevo horario acorde con las peticiones de la consellería. Lois dijo: «Temos ganas de dimitir pero imos seguir polos rapaces, agora é o que menos necesitan».

En el Agra de Raíces todos tenían muy claro que la decisión de reunificar los grupos no tenía ninguna lógica. Los propios profesores afirmaron: «Preferimos traballar máis horas pero con grupos máis pequenos». El Proyecto Abalar también formó parte del debate ya que, según un profesor de filosofía, «con tantos alumnos e ordenadores por grupo será moi frustrante dar clase». Una situación insostenible que ha puesto fin a la posibilidad de elegir libremente las optativas a cursar y en algunos casos, incluso, ha supuesto la eliminación definitiva de algunas como Métodos Estadísticos.

El director, después de casi tres meses en el cargo, ha hablado del posible efecto que estas decisiones tendrán en un centro que «tiña moito prestixio». Una sanción que las palabras de Lois resumieron así: «Temos unha profesora de música dando clases de informática».