El gobierno local considera prácticamente imposible dar con una salida para mantener la guardería del IDC
VIGO CIUDAD
Las últimas vías recorridas para buscar una solución para resolver el conflicto de la guardería de Cee no han dado sus frutos.
El alcalde se reunió ayer con el presidente de la Fundación Castro Rial, Marcelo Castro. El encuentro institucional fue entre Neria -la preside Vigo- y la Cámara de Comercio de A Coruña -con Marcelo Castro a la cabeza- pero el regidor aprovechó la cita para plantear una posible solución al caso de la guardería del IDC.
A esa solución habían apuntado también los padres con niños matriculados para no perder el servicio. Se trataba de que los titulares del inmueble, cedido en su momento al IDC para su uso como escuela infantil, recuperasen la concesión hecha y siguiera con el centro abierto.
Tanto los padres como el regidor pensaban que la cesión la había realizado la Fundación Castro Rial, pero su presidente, cuenta Vigo, le explicó que no fue esa entidad, sino una empresa de la familia, la que prestó el edificio. La fundación no tendría nada que ver con el centro y además, dijo Vigo, no tendría posibilidad de hacerse cargo de la guardería.
Esa posibilidad quedó, pues, cerrada. La otra que esgrimían los padres y que la vicealcaldesa, Amancia Trillo, consideró viable en su día, tampoco saldrá adelante. «O Concello non pode facerse cargo diso», dijo ayer Vigo, quien explica que el Ayuntamiento carece de capacidad económica para hacer frente a esa posibilidad, además de los problemas legales que podrían surgir. Considera, además, que tampoco considera la posibilidad de que el IDC siga con el centro.
Vigo asegura que el compromiso del Ayuntamiento con la oferta de plazas es evidente. «Pero nós non podemos resolver o problema da demanda de prazas de toda a zona», dice.
La escuela infantil del IDC cerrará, si nada lo remedia -y parece que no hay remedio- el próximo 31 de julio. Se perderán cerca de medio centenar de plazas en el municipio, donde solo quedará una en servicio, la municipal, ya saturada.
El Ayuntamiento tiene fondos de la Diputación para rematar una segunda guardería cuya obra ya ha sido adjudicada, pero entre las actuaciones y los trámites necesarios para abrirla, parece complicado que pueda dar servicio antes del próximo mes de noviembre. Los más pesimistas dicen que podría no abrir sus puertas hasta el curso 2011-2012, lo que generaría un grave problema en la localidad para decenas de padres.
Solo Corcubión tiene una guardería en el entorno, pero también está saturada y con lista de espera. En Fisterra no existe ese servicio.
Falta de limpieza
En el centro del IDC todo apunta a un final inminente. La entidad se ha desentendido de la gestión, adeuda nóminas de varios meses a las trabajadoras -alguna ha acabado reclamando en los Juzgados- y también a la empresa de limpieza, que ya no acude a la guardería.