La conselleira de Mar y las cofradías trabajarán juntas contra el furtivismo

CARBALLO

30 jul 2009 . Actualizado a las 02:00 h.

La conselleira de Mar, Rosa Quintana, realizó ayer una visita institucional a las cofradías de Malpica, Corme y Laxe, donde tuvo la oportunidad de entrevistarse con los socios y sus representantes. Es el primer encuentro de este tipo que mantiene con los marineros de la Costa da Morte desde que llegó al cargo con el nuevo gobierno de la Xunta. Las reuniones le sirvieron a Quintana para conocer personalmente a los responsables comarcales con los que habló de temas como el furtivismo, las jubilaciones de las mariscadoras, los problemas de la pesca de cerco y, en general, las principales preocupaciones que afectan a los profesionales del sector en la comarca.

A la salida de la cofradía de Corme, precisamente el lugar donde los Gardacostas de la Xunta decomisaron 430 nasas ilegales el martes, la conselleira aseguró que había percibido una buena receptividad por parte de los marineros locales para acabar con estas prácticas que esquilman los recursos naturales. «Non é un problema só de Corme. Todos estamos implicados nese tema e temos que traballar xuntos, as Administracións, as forzas de seguridade e o sector no seu conxunto para acabar máis cedo que tarde con esta lacra», manifestó Quintana, quien no hizo referencia a compromisos concretos, pero sí a declaraciones de buenas voluntades.

La responsable del sector pesquero también escuchó las peticiones de las mariscadoras que le solicitaron una modificación de los coeficientes reductores que les permiten jubilarse antes que los trabajadores de otras actividades. La titular de Pesca se mostró receptiva a estudiar el tema porque no considera normal que «mulleres de determinada idade teñan que andar todos os días saltando polas pedras».

En el capítulo de solicitudes, los socios de las diferentes cofradías formularon multitud de cuestiones relacionadas, en su mayor parte, con subvenciones y cambios en determinados reglamentos. Los armadores de Malpica instaron a la conselleira para que estudie los perjuicios que les causa a los barcos de la zona la «competencia desleal» generada por las importaciones masivas de pescado foráneo.

La reunión de Laxe se desarrolló únicamente entre los responsables de la Xunta, el patrón mayor y el secretario de la cofradía. Al contrario que en los casos de Malpica y Corme tampoco acudió el alcalde de la localidad, Antón Carracedo. Los temas a tratar, según comentaron los representantes de los pescadores, fueron temas internos del funcionamiento de la corporación que la conselleira se comprometió a estudiar para poder resolverlos. Según informó a Radio Voz Bergantiños el concejal del PP de la localidad, José Antonio Suárez, entre las peticiones que le formularon a Quintana estaba la solicitud de una ayuda de 20.000 euros para reparar la numerosa maquinaria que la cofradía tienen averiada.

Adiós a las cajas de madera

De las palabras de la conselleira se desprende que nada o muy poco puede hacer su departamento para garantizar la supervivencia de los aserraderos de la comarca que se dedican a la elaboración de las cajas de madera para el pescado, ahora prohibidas. «Non é unha cuestión do porto de Vigo. A normativa comunitaria di que os envases para o peixe non poden ser permeables» aseguró Quintana quien se ha comprometido a estudiar un tema que genera la «desesperación de moita xente». Manifestó que su intención no es la de acabar con este sistema del que viven muchas familias y que los pescadores apoyan, pero en cualquiera caso, la solución tendría que pasar por la modificación de las normas europeas.