La asociación Pan de Raposo es una de las más veteranas de la Costa da Morte de cuantas se dedican a la micología. Su presidente, José Manuel Castro Marcote, asegura que en la comarca pueden encontrarse más de 3.000 especies de setas, de las que la entidad tiene catalogadas más de mil. La más abundante en la zona es la cantaherullus cibarius, también conocida como rebozuelo o cantarelas. Se trata de un ejemplar macizo, de color amarillo huevo, en forma de embudo y con el pie y el sombrero poco diferenciados. «Son moi ricas, non se agusanan e aguantan moito», explica Castro.
El rebozuelo crece en los bosques planifolios, preferentemente en robledales, y también en los pinares y a menudo se le encuentra semi-enterrado bajo la hojarasca o el musgo. Posee un agradable olor afrutado y es perfecto para elaborar guisos.