Adjudicadas en 6,4 millones las obras de la depuradora de aguas residuales de A Ponte do Porto

La Voz

CARBALLO

15 abr 2008 . Actualizado a las 02:00 h.

La Empresa Pública de Obras y Servicios Hidráulicos, un ente adscrito a la Consellería de Medio Ambiente, acaba de adjudicar las obras de construcción de la depuradora de aguas residuales de A Ponte do Porto. El importe exacto de esta adjudicación es de 6.472.000 euros. El presupuesto base de licitación era de 7.454.00 euros, con lo que la rebaja ha sido de un millón de euros. La contratista elegida para los trabajos es la compañía Espina y Delfín. La resolución definitiva fue publicada en el Boletín Oficial del Estado (BOE) de ayer.

El concurso de esta importante obra, una de las inversiones más importantes en el municipio de Camariñas en los últimos años como proyecto unitario, se realizó a finales del pasado mes de noviembre. Ahora, la empresa tendrá por delante quince meses para su ejecución: tres para la adecuación del proyecto inicial a las necesidades y doce para las obras.

La depuradora se construirá cerca del lugar de O Allo, en la parroquia porteña, en la salida hacia la capital municipal, a un centenar escaso de metros de la carretera principal y más o menos equidistantes del río Grande.

En A Ponte do Porto se instalarán dos estaciones de bombeo, una en los llamados Terreos do Cura, y la otra frente al paseo marítimo-fluvial de la localidad. Dada la relativa proximidad, parroquias vimiancesas como Carnés o Cereixo se verán beneficiadas de esta servicio y, tal y como se anunció en el momento de la licitación, es probable que quede ya preparada para futuras conexiones.

La depuradora de A Ponte cubrirá el saneamiento de uno de los últimos enclaves de la Costa da Morte, con acceso a las rías, que están sin depurar. En realidad, hay más, como Camariñas o Fisterra, pero las obras están en una fase mucho más avanzada. Lo mismo ocurre con la vecina Vimianzo, con trabajos similares en marcha en lo que será este año el polígono industrial.

Las previsiones del proyecto apuntan a que estas instalaciones (las porteñas) cubran las necesidades de unas 5.000 personas.