Un mes después de la reunión que Xunta y Diputación mantuvieron para desbloquear el proyecto de recuperación del dolmen de Dombate, las medidas prometidas para garantizar la integridad del megalito comienzan a tomar cuerpo.
Los técnicos de la Diputación remitieron el jueves a Patrimonio las medidas que se adoptarán para la protección del yacimiento durante la instalación de una nueva carpa que sustituirá la cubierta colocada de forma provisional hace casi 20 años, tras las tres campañas de excavaciones dirigidas por José María Bello.
El nuevo entoldado será de 900 metros cuadrados, con lo que no solo tapará el dolmen, sino que también servirá para proteger las excavaciones que se realizarán en el entorno más inmediato y que están pendientes desde hace meses.
Comisión de seguimiento
Además de la decisión de colocar una nueva cubierta, en la Diputación se ha suspendido la comisión de seguimiento del plan de recuperación. Ahora, todas las decisiones que se toman al respecto del dolmen emanan directamente de la presidencia del organismo provincial. Salvador Fernández Moreda se mostró ayer muy optimista con la situación en la que se encuentra actualmente el proceso.
Al mismo tiempo, se ha iniciado el expediente para encargar el proyecto de modificación del edificio que contendrá el megalito y que se adaptará a lo solicitado por la Dirección Xeral de Patrimonio.
Todo el proceso para mejorar la situación del yacimiento comenzó hace dos semanas con el envío a Cultura del proyecto de instalación de la carpa. El domingo, los responsables de una empresa de toldos, a la que podría haber sido encargada la nueva cubierta, visitaron el megalito y tomaron medidas para la carpa. Antes de comenzar los trabajos, que están pendientes del visto bueno final de la Consellería de Cultura, se realizarán excavaciones, que correrán a cargo de Manuel Lestón, quien además llevará el control arqueológico de las obras. La nueva instalación está valorada en 90.000 euros.
Entre las medidas que los técnicos de la Diputación tomarán para garantizar la integridad del monumento durante los trabajos está la superposición de las dos carpas, puesto que no se retirará la actual hasta que no esté terminada la nueva, que será más alta. Además, el dolmen será cubierto con colchonetas de espuma para evitar accidentes que puedan dañarlo.