Bergantiños es una de las comarcas que genera más residuos de obras

Xoán Ramón Alvite Alvite
X. R. Alvite CARBALLO

CARBALLO

CASAL

La zona de Soneira ocupa uno de los últimos lugares de Galicia Medio Ambiente ha analizado los efectos de la construcción y la demolición de edificios

20 ago 2005 . Actualizado a las 07:00 h.

La comarca de Bergantiños ocupa el cuarto lugar en la provincia y se sitúa entre las diez primeras de toda Galicia en cuanto a la generación de residuos procedentes de la construcción y demolición de edificios. La preceden las áreas coruñesas de Santiago, A Coruña y Barbanza. En el año 2004, la cantidad de residuos producidos llegó a 19.174.506 kilos, de los que el 56,1% provenían de la construcción; el 33,3%, de la rehabilitación, y el 10,6% restante, de la demolición de estructuras. Por su parte, en la zona de Fisterra se generaron 5.118.000 kilos y, en la de Soneira, 1.771.000. Composición La composición de los escombros es muy diversa, si bien dos tercios son hormigón y material cerámico. También se componen de una parte importante de metal, 11,2%; madera, 5,2%, y plástico, 5,1%. Del mismo modo, y en un porcentaje inferior, se originan residuos de papel, vidrio, yeso y de variados materiales pétreos. Los datos se desprenden del estudio denominado Programa de Xestión de Residuos de Construcción e Demolición de Galicia 2005-2007 , publicado por la Consellería de Medio Ambiente y que persigue, tras el análisis de la situación actual, la puesta en marcha de un programa específico de actuaciones que permitan, a través de la reutilización y el reciclaje, una gestión racional y sostenible de los vertidos. Según señala el propio documento, el número de residuos de obra ha ido crecido constantemente en Galicia, hasta alcanzar los 360 kilogramos por habitante y año. En la comarca de Bergantiños, esta cifra no supera los 275 kilos, mientras que en Fisterra es de 206 y en los tres municipios de Soneira, de tan sólo 83. Esta cantidad, cuatro veces inferior a la media gallega, sitúa a Soneira, junto a la comarca lucense de Os Ancares, con 50 kilos, y la ourensana de A Baixa Limia, con 58 kilos, como las bisbarras gallegas que generan un menor número de residuos provenientes de la construcción. El estudio de Medio Ambiente pronostica que, para el año 2007, la producción de estos escombros crecerá en la zona más de un 10%, llegando a superar los 28 millones y medio de kilos. De cumplirse esta previsión se promediarían, en Bergantiños, Soneira y Fisterra 206 kilos al año por cada habitante, 18 más que el año pasado. Actuaciones Entre las actuaciones que se prevén destaca el favorecimiento de la instalación de plantas de reciclaje de estos residuos de iniciativa privada y la concesión, mediante concurso público, de otras promovidas por la propia Administración. Estas últimas estarían situadas, principalmente, en aquellas comarcas con menor densidad de población y, por tanto, con menor posibilidad de asentamiento de empresas privadas. Estas factorías, según explican desde la Xunta, serían capaces de realizar una selección minuciosa de los distintos tipos de componentes de este tipo de residuos, y permitirían la recuperación de una parte importante. En la provincia de A Coruña sólo se colocarían, en principio, dos de ellas: una estaría situada en Ortigueira y la otra en Santa Comba. También se reseña el vertedero existente en Cerceda, que cuenta con una capacidad de 54.000 toneladas, así como dos plantas privadas con autorización temporal en los municipios de Vimianzo y Coristanco.