La vida es bella
Mi amigo Nando está esperando jubilarse como quien espera agua de mayo. Le toca para agosto; pero entre el mes de vacaciones y los días que le deben, seguramente se retire un poco antes. Anhela ese momento y lo comprendo: lleva dándole a destajo tantos años que echa ya la lengua fuera. Yo no anhelo nada porque ya me he jubilado. Fue el 22F pasado; pero aunque no me hubiera aún jubilado, igual me daba que por mayo hiciera sol y se perdiera la cosecha o que lloviera. Será porque yo era “pre” y él nunca lo fue. Yo dejé de acelerar hace unos años y él llega al final de su carrera labor ...