La toxina obligó a destruir el bivalvo que se extrajo el lunes en los bancos naturales de la ría de Muros-Noia

Ribeira / La Voz

BARBANZA

El patrón mayor reconoció que la situación que están viviendo no es nada gratificante

30 nov 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Los productores de Noia volvieron a recibir otro duro golpe. El lunes se conoció que el marisco que se había extraído tenía toxina y no se podía comercializar. Un día de trabajo tirado por la borda y unas pérdidas de más de cien mil euros. La marea roja está haciendo estragos en el colectivo, El patrón mayor, Santiago Cruz, señaló que los compradores devolvieron el molusco y hubo que destruirlo.

A última hora de la noche del lunes se conoció el resultado de los análisis realizados en las aguas de la ría de Muros-Noia. Dio positivo por lo que se alertó a los productores para que no bajasen a los arenales. Los compradores también tuvieron conocimiento de esta situación por lo que devolvieron el producto.

Santiago Cruz comentó que la situación es muy complicada y difícil para un colectivo que apenas bajó veinte días a la playa.

Para paliar los daños ocasionados en esta jornada, la cofradía se hará cargo del pago a los mariscadores. Según el dirigente, más de cien mil euros. Sin embargo, aclaró que esta situación no se puede sostener mucho más. «Facémonos cargo porque aínda hai un remanente, pero non pode ser así sempre».

El marisco devuelto por los compradores se lo llevó una empresa, la única autorizada en Galicia, para destruirlo pues así lo decretan las autoridades sanitarias en estos casos.

La situación es muy complicada, según el dirigente, y en los próximos días se reunirá el cabildo para analizarla y ver lo que harán. Lo que si es seguro es que posiblemente esta semana no volverán a faenar. Se necesitan dos análisis negativos seguidos. El primero se hará hoy y el segundo el viernes.

El patrón mayor reconoció que la situación que están viviendo no es nada gratificante pues las pérdidas son cuantiosas. De la actividad extractiva dependen alrededor de 1.500 personas, incluidos también muchos mariscadores de municipios limítrofes como Lousame, Porto do Son e incluso Muros.

Tercera marea roja en aguas de la ría en el último mes 

Esta es la tercera vez en la que se detecta toxina en la ría de Muros-Noia a lo largo de este mes. La primera empezó el día 30 de octubre lo que provocó el cese de la actividad durante quince jornadas. Nada más abrirse la campaña de nuevo, volvió a entrar otra marea roja obligando a parar. El lunes, los productores regresaban a los arenales tras un paréntesis de una semana, pero los muestreos realizados detectaron contaminación en las aguas. Ahora tan solo queda esperar acontecimientos.