La campaña de verano del mejillón cayó un 34% con respecto al 2015

J.M. Jamardo RIBEIRA

BARBANZA

MARCOS CREO

Durante los meses estivales se descargaron 30.800 toneladas en Arousa y Muros-Noia

23 sep 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

El sector mejillonero acabó la campaña de verano y ya está preparando la de la importación. Después de la época estival, en la que el bivalvo tuvo una buena salida tanto en la ría de Arousa como en la de Muros-Noia, el colectivo hace números. Según los datos facilitados por la Consellería do Mar, en los meses de junio, julio y agosto, las descargas en los puertos de estas dos rías fueron de 30.873 toneladas, mientras que en el mismo período del año pasado la cifra ascendió a 47.184, un 34% más.

El presidente de la agrupación Arousa Norte, Alejandro Tubío, comentó que en esta ocasión «fomos algo máis lentos nas vendas, pero aínda así a campaña podemos dicir que foi bastante boa». Y es que este verano no sufrieron demasiados episodios tóxicos, tan solo en las primeras semanas de junio, durante las que no pudieron sacar el molusco.

El dirigente se mostró bastante satisfecho con el desarrollo de la campaña estival a pesar del descenso de las descargas en Arousa, que, según explicó, se debe a que el año pasado en la mayoría de la rías gallegas la toxina estuvo instalada durante casi toda la época veraniega, por lo que la mayor parte de la producción que salía era de los polígonos de bateas arousanos.

Polígonos abiertos

Este año, según el dirigente, «case todos os polígonos estiveron abertos e repartiuse o traballo. Os cocedoiros, as depuradoras e as fábricas son as mesmas de sempre e este ano incorporáronse á oferta os produtores de Vigo, Pontevedra, Sada e tamén Muros-Noia, que permaneceu aberto todo o verán». Esta situación provocó que haya marisco en el mercado y también un mayor número de vendedores, algo que no ocurrió la campaña anterior.

Por su parte, el vicepresidente de Opmega, el ribeirense Juan Fungueiriño, indicó que ellos no notaron mucho el aumento de la competencia. De hecho, incluso apunta: «Creo que sacamos máis para fábrica que o ano pasado». Sí reconoció que para la exportación la actividad fue inferior a otros años.

A pesar de que las ventas en la ría más importante de Galicia cayeron con respecto al mismo período del año anterior, es de reseñar que en esta ocasión se incorporaron a la estadística las bateas de la zona de Muros-Noia, que la temporada pasada permaneció cerrada por toxina. Aún así, las descargas no fueron muchas pues se contabilizaron algo más de 239 toneladas.

Las ventas de mejillón durante los tres meses de verano se aproximaron a los dieciséis millones de euros. El año pasado la cifra superó los veintidós millones.

Uno de los problemas que está detectando el sector y que les puede perjudicar es que el marisco no se está agarrando bien a las cuerdas. Indican que hubo bastante desove pero se despega con facilidad, según apuntó el portavoz de Opmega.