Ala hora de regular la circulación y estacionamiento de vehículos en un municipio, siempre es deseable apostar por la información, antes que por la imposición. En este sentido, la labor que está ejerciendo la Policía Local de Ribeira está basada firmemente en informar al ciudadano. Explicar al conductor sobre las consecuencias de la infracción en vez de optar por la multa.
Pero hay circunstancias en las que no queda más remedio que recurrir a la sanción por la existencia de vehículos estacionados en doble fila que obstruyen ostensiblemente la circulación o que ocupan aparcamientos reservados a personas con movilidad reducida, entre otras situaciones irregulares que se dan en las calles de la ciudad.
De todas formas, en el municipio de Ribeira la multa es la excepción. Y es que hay estudios que constatan que el nuestro es el Ayuntamiento gallego que menos sanciones impone y el que menos coches retira con el servicio de grúa. Desde aquí, quiero abogar por que el civismo, el respeto y la voluntad de colaboración reinen en nuestras calles y carreteras. Que prime la concordia por el bien de todos los ciudadanos.