Autoridades y feligreses compartieron un acto que se convirtió en un homenaje al párroco José Luis Fuentes
12 nov 2011 . Actualizado a las 06:00 h.Los feligreses de la parroquia de San Martiño de Noia vivieron ayer un día grande: les visitó el arzobispo Julián Barrio, que bendijo la renovada rectoral. Aunque a Barrio le tocaba el papel protagonista, prefirió cedérselo al párroco José Luis Fuentes, al que agradeció todo el trabajo hecho por la parroquia y su esfuerzo para que las obras de la rectoral se pudiesen llevar a cabo.
Fueron un buen número de personas las que acudieron al acto. Por una parte, estuvieron un nutrido grupo de autoridades, tanto políticas -había miembros de distintos partidos noieses, con el alcalde, Rafael García Guerrero, a la cabeza- como de la Guardia Civil y del Ejército. También acudió una de las personas que se encargó de preparar tan emotivo acto. Se trata del presidente de Cáritas en Noia, José Luis Rodríguez Hermo, que también expresó su satisfacción por la renovación de las instalaciones. Y es que el interior de la rectoral de San Martiño poco tiene que ver ahora con las antiguas dependencias. Se rehabilitaron todos los espacios, y se cuenta con cómodas salas para celebrar todo tipo de actos.
Tras observar las obras realizadas, los asistentes participaron en una eucaristía. Y, ya al cierre de esta redacción, se disponían a compartir unos pinchos de confraternidad. Se preveía poner así el broche de oro a un acto que, a buen seguro, quedará grabado en la memoria de los feligreses de Noia.