La Feira Mariñeira transforma el paisaje de la ciudad ribeirense

Paula souto RIBEIRA / LA VOZ

BARBANZA

Más de un centenar de puestos ofrecen a los visitantes todo tipo de productos de artesanía y diversos alimentos

20 ago 2011 . Actualizado a las 06:00 h.

La ciudad ribeirense se ha transformado por completo con motivo de la Feira Mariñeira que se celebra desde ayer en el municipio. Más de un centenar de comerciantes llegados de toda la geografía española abarrotan el casco urbano, caracterizado para la ocasión con alpacas, banderas, redes y otros elementos típicos.

Disfrazados con un parche en un ojo, una pañoleta en la cabeza y una espada, hasta puede verse en algunos expositores a dependientes que se han transformado en auténticos piratas para rememorar los típicos mercados de trueque de antaño.

Los propietarios de varios puestos abrieron ayer mucho antes de la hora prevista, como es el caso de Carlos Amares: «La mañana era para montar y tener todo listo para media tarde, que era cuando comenzaba oficialmente el mercado. Pero como ya hemos terminado, estamos por aquí por si se acerca algún comprador».

La mayoría de los feriantes son veteranos, no es la primera vez que vienen a Ribeira. A pesar de que aseguraron que la crisis se nota, Samuel San José destacó: «Las ventas han bajado un 50% con respecto a otros años. Aunque en Ribeira, como hay muchos turistas, suele haber demanda de productos».

Gran diversidad

Bisutería, artículos de cuero, objetos realizados con cristal, embutidos o quesos, juguetes de madera o tesoros del mar son algunos de los productos artesanos que nos podemos encontrar en esta edición de la feria.

Para los medievos más místicos no faltan los puestos de productos naturales, incienso, hierbas curativas o amuletos de la suerte que recuerdan a los típicos remedios caseros de las abuelas.

Y como a los buenos corsarios les gusta beber, las tabernas ofrecen una diversidad de licores naturales y tentempiés para resistir y sumergirse de lleno en una localidad netamente marinera.