Cinco chavales que irrumpen con ganas de ser Heredeiros

María Xosé Blanco Giráldez
M. X. Blanco RIBEIRA/LA VOZ.

BARBANZA

La banda de rock se impuso en el primer concurso Concello de Ribeira

22 oct 2010 . Actualizado a las 02:00 h.

Tienen a los Heredeiros da Crus y a Jabon Blue como ídolos y, con el sueño de llegar algún día a tocar ante miles de personas, irrumpieron en el panorama musical barbanzano hace tan solo siete meses los chicos de Entrelíneas. Se trata de cinco estudiantes, de 16 y 17 años, que además de presentarse en sociedad con varios conciertos, han logrado imponerse en el primer concurso Concello de Ribeira.

En un primer momento fueron Marcos Barreiro, Manuel Caamaño, Santi Iglesias y Fran Regueira los que se unieron con el fin de dar forma a un grupo de música. «Teníamos familiares y conocidos que formaban parte de bandas locales y, como a nosotros nos gustaba ese mundo, decidimos intentarlo», comenta Marcos, uno de los impulsores de la banda.

Lo que ocurrió fue que en el grupo de amigos, todos ellos de Ribeira, no había batería: «Recurrimos a Martín Sampedro, a quien no conocíamos de nada y que por aquel entonces tocaba en otra banda», recuerda Barreiro.

Fue así cómo nació Entrelíneas, cuyos miembros tienen en común, además de su afición por la música, su pasión por el rock y su predilección por un par de bandas de Ribeira: Heredeiros da Crus y Jabon Blue. De hecho, buena parte del repertorio de los cinco jóvenes está formado por temas de estos dos grupos; a los que se añaden canciones de otras formaciones nacionales, como Platero y Extremo; e incluso internacionales, como AC/DC.

De su corta trayectoria, los integrantes de Entrelíneas destacan la media docena de conciertos que han ofrecido hasta el momento y, sobre todo, su participación en el primer concurso de grupos musicales Concello de Ribeira, desarrollado entre finales de julio y principios de agosto. Aseguran que nunca pensaron en hacerse con este certamen, pero no ocultan que conseguir la victoria les ha servido como estímulo: «Es cierto que para ese certamen ensayamos mucho y estábamos muy motivados; por lo que, el hecho de ganarlo fue una alegría enorme. Es algo que nos impulsa a seguir», apuntó Marcos Barreiro.

Pese a que Entrelíneas tiene previsto hacer un parón durante el invierno, este solo afectará a lo que a actuaciones en directo se refiere. La idea de estos cinco jóvenes es seguir adelante con los ensayos, si cabe con más fuerza, con el propósito de preparar algún que otro tema propio e incluso grabar una maqueta: «Actualmente estamos ensayando en los locales que tiene el Concello de Ribeira en el auditorio, pero para grabar tenemos pensado utilizar un estudio profesional que nos ha ofrecido un amigo nuestro», explicó el bajista de la banda, Manuel Caamaño.

Un objetivo común

Al igual que para el resto de sus compañeros, para él lo importante de formar parte de Entrelíneas es ver cómo el público disfruta con sus conciertos: «Ver a la gente pasárselo bien es lo mejor». Es de la misma opinión el cantante del grupo, Fran Regueira: «Gústame moito entreter á xente».

De momento, los chavales de Entrelíneas están empezando en el difícil mundo de la música y compaginan esta afición con los estudios: «Por ahora, ensayamos y actuamos con el propósito de pasarlo bien y de entretener a la gente. Somos conscientes de que vivir de la música es muy complicado, por lo que no nos planteamos un futuro profesional en este campo», apunta Barreiro.

Sin embargo, a estos cinco chicos de Ribeira no les importaría en absoluto seguir los pasos de los que son sus grupos de referencia, Heredeiros da Crus y Jabon Blue: «Claro que nos gustaría llegar a ser como ellos algún día, reunir en un concierto a miles de personas y hacer historia, pero somos conscientes de que no es nada fácil», reconoce el guitarrista.

A corto plazo, su objetivo es seguir ensayando para regresar a los escenarios el próximo verano y hacer de nuevo disfrutar a su público.