El polígono sonense se debate entre dos posibles ubicaciones

Sara Ares

BARBANZA

08 nov 2007 . Actualizado a las 02:00 h.

Una delegación integrada por políticos, técnicos y empresarios de Porto do Son viajó ayer a Santiago para mantener una segunda reunión de trabajo sobre el polígono industrial con el director xeral del Instituto Galego da Vivenda e Solo, Daniel Pino, y con otros responsables del departamento de Teresa Táboas. En esta ocasión, el encuentro finalizó con un acuerdo, consistente en que profesionales de la firma Consultora Galega, que es la que está redactando el nuevo planeamiento urbanístico sonense, elaborarán un informe acerca de la viabilidad de las dos posibles ubicaciones que se barajan para construir el parque empresarial.

La comitiva municipal estuvo integrada por el alcalde, Manuel Tomé; los portavoces del PSOE y del grupo de los no adscritos, Ramón Quintáns y Ánxela Franco, respectivamente; y el presidente y otro miembro de la directiva de la patronal, Joaquín Chouza y Ramón Vila. Estos estuvieron acompañados, a su vez, por el arquitecto del Concello y un técnico de Consultora Galega.

En representación de la Xunta, participaron en la entrevista Daniel Pino; el delegado provincial de Vivenda, Xoán Carlos Bascuas; y un miembro de Suelo Empresarial del Atlántico, entre otros.

Condición indispensable

Desde la consellería se transmitió a los integrantes de la delegación sonense que, para desarrollar el polígono mediante una modificación del plan sectorial gallego del 2004, lo que deben hacer es buscar una ubicación que, de algún modo, quede conectada con el emplazamiento que se había fijado inicialmente para el parque en ese documento aprobado hace tres años.

Esa localización original, en Cadeiras, fue descartada en su día porque en parte de ella se hallaron unos petroglifos.

En la reunión de ayer, el alcalde puso sobre la mesa tres posibles ubicaciones: Queiruga, entre Carballosa y Xuño, y Cans. Sin embargo, las dos primeras quedaron descartadas, entre otros motivos porque no cuentan con el beneplácito de los empresarios.

Con respecto a la tercera, los portavoces de la oposición reprocharon al regidor que no ordenara a los técnicos, tal y como habían acordado en una reunión, que reflejaran sobre los planos la inclusión de una franja de conexión con los terrenos del antiguo polígono delimitado en Cadeiras.

En el transcurso de la entrevista, Ánxela Franco propuso otro emplazamiento, situado encima de esas fincas de Cadeiras, por entender que suscita menos rechazo social en la parroquia, no incluye zona de concentración parcelaria ni terrenos de uso agrícola, y la mayoría de las propiedades pertenecen a la comunidad de montes de Nebra.