El sector marisquero de A Pobra do Caramiñal no levanta cabeza. El patrón mayor reconoce que la actividad extractiva en los últimos años está pasando por un mal momento con la reducción de capturas debido a la escasez de bivalvo. La entidad realizará un estudio en la zona de O Areal para evaluar los daños y comprobar el estado del marisco y del lugar. La almeja fina es una de las principales especies existentes en esta concesión. También se reproduce la denominada japónica y el berberecho. El marisco que más abundaba era el de tamaño mediano, que estaría apto para comercializar en el mes de diciembre. Ahora, la incertidumbre se cierne sobre el sector, que puede despedirse de la campaña de Navidad si sus temores se confirman. Espalda Lo que más molesta a los productores pobrenses es que O Areal se estaba recuperando poco a poco en los últimos años. Quedó muy tocado como consecuencia de las riadas del año 2000 y la producción sufrió un importante bajón en los ejercicios siguientes. Maneiro Castro aseguraba que la situación que vivían los mariscadores pobrenses era tercermundista. No entiende cómo las autoridades dan la espalda a un colectivo importante de cientos de familias de la localidad, que viven de esta actividad, permitiendo continuos vertidos que ponen en peligro el marisqueo. Espera que el peso de la justicia caiga sobre los culpables.